Quien fuera titular de Defensa en el gobierno de Aznar destaca que "todos somos iguales ante la ley en Derecho, pero no en la vida cotidiana donde interesa más preservar unas vidas que otras"
"Espero que no haya una cascada de dimisiones porque eso no es bueno y debería bastar con la dimisión del Jemad"
Eduardo Serra, quien fuera secretario de Estado de Defensa con el gobierno de Felipe González y luego ministro de Defensa con José María Aznar, ha valorado en El Mirador de Andalucía la polémica en torno a la dimisión del Jefe del Estado Mayor de la Defensa, el Jemad, el general Miguel Angel Villarroya tras recibir la vacuna del covid sin que hasta el momento esté claro si existió o no una orden ministerial para ello.
Serra se ha mostrado a favor de que el personal con tan alta responsabilidad se vacune porque entiende que "al que más hay que proteger es al jefe". Y es que en su opinión "todos somos iguales ante la ley en Derecho, pero no en la vida cotidiana donde interesa más preservar unas vidas que otras. Una vida vale igual que otra pero en determinadas circunstancias unas valen más que otras y si hace más hay que cuidarlo más". Así que ha hecho un llamamiento a "alejarse de demagogias" y, aunque admite no tener información al respecto, "no me extrañaría que el alto mando militar tuviera prioridad para vacunarse", al igual que la pide para el gobierno.
Así las cosas, el ex titular de Defensa espera que "no haya cascada de dimisiones porque eso no es bueno", y entiende que "debería bastar con la dimisión del Jemad". De hecho, ha defendido al gobierno en su actuación en la pandemia: "Puede que se hayan cometido errores, pero seguro que lo ha intentado hacer lo mejor posible y la presunción siempre debe estar a favor del gobierno".
Eduardo Serra es ahora presidente de la Fundación Transforma España de la consultora tecnológica Everis y en este ámbito se ha referido a la necesidad de invertir bien los 140.000 millones de euros que van a llegar del fondo Next Generation de la Unión Europea. "Hay que ponerlo donde más repercuta y en sectores especialmente dañados como el Turismo en el que además tenemos una ventaja competitiva respecto al resto de países europeos y significa el 15% de nuestro PIB. Pero también, y muy importante, en la tecnología porque hemos pagado haber perdido la Revolución Industrial hace 200 años y ahora no podemos perder la revolución digital".