La exposición recoge medio centenar de obras entre litografías y carteles de Kandinsky, Chagall y Poliakoff
La muestra es un homenajear a una de la publicaciones clave en la difusión de las vanguardias artísticas entre 1938 y 1951
Se podrá visitar hasta final de noviembre
Hablar de "XXe Siècle" es referirse a una revista que logró reunir en sus páginas ilustraciones de los principales artistas del siglo pasado, como Kandinsky, Chagall, Poliakoff, Miró, Matisse, Picasso, Magritte y Calder, entre otros muchos, como muestra la nueva exposición del Museo Ruso de Málaga.
La muestra, presentada este miércoles, recoge una selección de una colección privada de dicha publicación que está depositada en la Casa Natal de Picasso, explica su comisario, Carlos Ferrer, durante un recorrido por la exposición.
Esta revista tuvo un precedente, "Chroniques du jour", que el editor de ambas, San Lazzaro, empezó a publicar al llegar a París "para recuperar el espíritu de otra revista italiana anterior relacionada con el futurismo, la 'Cronache d'Attualitá' de Bragaglia, que quería contar todo lo que sucedía en torno a las artes, la literatura y también la arquitectura".
Cuando nació en 1938 en su primera etapa y especialmente a partir de su segunda etapa desde 1951, "XXe Siècle" se dedicó especialmente a las artes plásticas.
Ya en el primer número de 1938 colaboraban artistas como Miró, pero especialmente Kandinsky, ya que San Lazzaro "quería hacer especialmente una revista para él, uno de los artistas más importantes, pero al que en Francia no se le daba el reconocimiento que merecía", apunta el comisario.
Tras el paréntesis por la Segunda Guerra Mundial, desde 1951 empiezan a colaborar más artistas como Duchamp, Matisse, Magritte o Chagall, "con la vocación de agrupar todas las tendencias, independientemente de su procedencia".
San Lazzaro pidió a Picasso que colaborara desde el principio y, aunque el artista malagueño fue reticente en primera instancia, finalmente en el número 1 de la segunda etapa apareció un dibujo suyo reproducido en la portada.
"Uno de los dones de Picasso es la ubicuidad, y no quería perdérselo", señala el comisario, que añade que en la primera etapa de la revista ya aportó una serie de en torno a una decena de naturalezas muertas sobre las que se realizaba un análisis en un estudio.
Además, en el número 10 el creador malagueño "aportó una litografía original de una pequeña corrida que es muy interesante", según Ferrer.
La Casa Natal de Picasso tiene en depósito esta colección privada desde hace cinco años y ha mostrado algunos números de la revista de forma puntual, pero quería "esperar al momento adecuado" para exponer de forma conjunta esta publicación "que aglutinó a todos los grandes nombres del siglo XX".
Cada uno de ellos participó "de la forma que estaba habituado", por ejemplo Miró o Picasso con litografías, en muchos casos originales, y Kandinsky "permitió a San Lazzaro utilizar planchas y textos que él había preparado".
El artista ruso fue seguramente el principal artífice de la grandeza de esta revista, porque en los inicios su editor, "prácticamente sin dinero, llamaba a todas las puertas y quien le abrió la suya fue Kandinsky", lo que después animó a otros artistas a sumarse a sus páginas.
Además de los ejemplares de la revista, en esta colección privada hay cartas de San Lazzaro a artistas o carteles de algunas exposiciones que acogió la galería existente en la sede de la publicación.
Cuando murió el editor se publicó un libro con ilustraciones de homenaje, nueve de ellas litografías originales y seis reproducciones de gran calidad, que se pueden ver en la exposición.
Como resalta el comisario, "a día de hoy es muy difícil encontrar números de esta revista, y algunos son casi imposibles de localizar a un precio asequible, porque en los últimos años su precio se ha disparado".