Los vecinos de 19 de los 24 distritos de la capital portuguesa sólo podrán salir para hacer la compra y trabajar.
Portugal ha pasado a ser el segundo país de Europa con peor tasa de contagios.
La reapertura de la frontera está prevista para el 1 de julio.
En Portugal, el gobierno ha confinado varios barrios de Lisboa al empeorar los datos de contagios. El vecino país ha pasado de ser un ejemplo en la gestión del coronavirus a convertirse en el país europeo con peor tasa de contagios sólo por detrás de Suecia.
Los vecinos de 19 de los 24 distritos de Lisboa sólo podrán salir de casa para trabajar o comprar. Son las nuevas medidas anunciadas por el Gobierno de Antonio Costa tras registrarse más de trescientos contagios y seis fallecimientos en las últimas 24 horas.
No son las primeras restricciones en la capital portuguesa. Desde el pasado martes las tiendas cerraban más temprano y se habían prohibido las reuniones de más de diez personas. Ha aumentado también la vigilancia policial para impedir nuevas fiestas ilegales como la que concentró a más de mil jóvenes en una playa el fin de semana pasado.
Desde el inicio de la pandemia, Portugal registró unas cifras muy contenidas de forma que, hasta hoy, computa poco más de cuarenta mil casos y mil quinientos cincuenta fallecidos. Pero los últimos rebrotes han acabado con esta imagen de destino seguro, algo que preocupa especialmente a su industria turística. La apertura de fronteras con España está prevista para el 1 de julio con un acto oficial al que asistirá Felipe VI.