Es el primer adelanto electoral en la historia de esta autonomía.
Llega tras los desencuentros entre el PP y Vox y la imposibilidad de acuerdo para sacar los presupuestos de 2026.
La convocatoria obliga a la remodelación del Gobierno central para la salida de Pilar Alegría, candidata socialista en estas autonómicas.
El presidente de Aragón, Jorge Azcón, ha confirmado el adelanto de las elecciones en la comunidad, que se celebrarán el 8 de febrero, un año y tres meses antes de lo que correspondería.
El adelanto, el primero en la historia de la autonomía, se produce después de un año y medio de desencuentros entre el PP y Vox, antiguos socios de Gobierno, y tras constatarse la imposibilidad de llegar a un acuerdo para sacar adelante los presupuestos de 2026, con los de 2024 ya prorrogados.
Azcón ha explicado en una comparecencia pública que esta lunes ha informado al Consejo de Gobierno extraordinario de que ha firmado el decreto de disolución de las Cortes como paso previo a una convocatoria electoral de la que aspira que salga un gobierno "fuerte" y que pueda aprobar un presupuesto "que atienda las principales necesidades de los aragoneses".
El presidente aragonés ha dicho que esta decisión se debe al "bloqueo" y la "irresponsabilidad" de la oposición en general, y de Vox en particular, que no ha querido apoyar unos presupuestos, por lo que ha tenido que convocar a los aragoneses a las urnas de forma anticipada para que expresen su voluntad y digan "cuál es el futuro que quieren para esta tierra".
Aragón vivirá su primer adelanto electoral y los partidos con representación parlamentaria -PP, PSOE, Vox, CHA, Aragón Teruel Existe, Podemos, IU y PAR- tendrán que preparar una campaña en tiempo récord, con las Navidades de por medio, y cerrar las candidaturas.
Azcón liderará la del PP con la ambición de no tener que depender de Vox, y el riesgo de que el equilibrio de fuerzas en las Cortes se mantenga, en liza con la ministra de Educación y secretaria general de los socialistas aragoneses, Pilar Alegría, que aspirará a la presidencia de Aragón, salvo sorpresa en las primarias que ha de convocar el partido.
El anticipo electoral en Aragón obligará a la remodelación del Gobierno central por la salida de la ministra Pilar Alegría, candidata autonómica de los socialistas.