NEGOCIACIÓN
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Así se calcularán las nuevas pensiones

Los trabajadores podrán elegir entre los últimos 25 años cotizados o bien con la ampliación del cómputo a 29 años, descartando los dos años con peores cotizaciones.

Esta ampliación se llevaría a cabo entre 2027 y 2038.

Una de las claves está en el "destope": los sueldos más altos cotizarán más, si bien, la mayor parte corre a cargo de la empresa.

CANAL SUR MEDIA 11 marzo 2023

Ya hay nueva propuesta del Gobierno para reformar las pensiones, pactada por los socios de Gobierno. Según el ejecutivo, esta propuesta cuenta con el visto bueno de Bruselas. ¿Cómo se calcularán nuestras pensiones? Según esta propuesta, a la que se oponen los empresarios, los trabajadores podremos elegir la opción que más nos convenga: seguir como hasta ahora y hacer el cálculo en función de los últimos 25 años trabajados, o bien con la ampliación del cómputo a 29 años, descartando los dos años con peores cotizaciones. Esta ampliación se llevaría a cabo entre 2027 y 2038. Lo fundamental para la estabilidad del sistema, y uno de los escollos que planteaba Bruselas, era la fórmula para aumentar los ingresos.

Para ello, la clave de esta reforma es lo que se llama el "destope" de las bases de cotización. Es decir, se elimina el límite de cerca de 4.500 euros a partir del cual no se cotiza a la Seguridad Social. En otras palabras, los sueldos más altos cotizarán más, si bien, la mayor parte corre a cargo de la empresa.

Lo mismo ocurre con la segunda herramienta para aumentar el dinero de las pensiones: se subirá también la aportación al fondo de solidaridad. Del 0,6 por ciento que se paga ahora se pasará al 1,2, del que un uno por ciento lo abona la empresa. Esta cuota extraordinaria se prorroga además hasta 2050. La previsión es que, de esta forma, en 30 años la recaudación crecerá en un 3 por ciento del Producto Interior Bruto.

La nueva opción de ampliar y descartar se desplegará progresivamente durante 12 años, a partir de 2026, "con el objetivo de beneficiar a los trabajadores con carreras irregulares".

El periodo de cómputo ha sido uno de los principales escollos en la negociación, ya que tanto los sindicatos como Podemos se oponían a ampliarlo. Para intentar avanzar en la reducción de la brecha de género en las pensiones, se introducen dos medidas.

Para empezar, con respecto a la cobertura de periodos sin cotizar, las denominadas lagunas, se mantiene que los vacíos de cotización se compensen con el 100 % de la base mínima los primeros 4 años y con el 50 % de la base mínima a partir del mes 49. A esto se añade, para las mujeres trabajadoras por cuenta ajena, el 100 % de la base mínima hasta el quinto año y el 80 % de la base mínima del quinto al séptimo año.

También se recoge que el complemento de brecha de género de las pensiones -actualmente fijado en 30,40 euros mensuales por cada hijo- tendrá durante 2024 y 2025 un incremento del 10 % adicional a la revalorización anual que se fija conforme a la subida de pensiones. Del lado de los ingresos, la reforma contempla varias medidas empezando por una subida de las cotizaciones de las bases máximas, que se hará entre 2024 y 2050 sumándole a la cuantía anual del IPC una cuantía fija de 1,2 puntos porcentuales.

Las pensiones máximas también se revalorizarán año a año con la cuantía anual del IPC más un incremento adicional de 0,0115 porcentuales acumulativos cada año hasta 2050. A partir de 2050 y hasta 2065 habrá incrementos adicionales.

Junto al progresivo destope de las cotizaciones máximas, se impone una cuota de solidaridad para la parte del salario que actualmente no cotiza por superar el tope máximo de cotización. Esta cuota será del 1 % en 2025 e irá aumentando a un ritmo de 0,25 puntos por año hasta llegar al 6 % en 2045. También para mejorar los ingresos del sistema se incluye una subida progresiva en el Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI) que ha entrado en vigor este mismo año y que supone un alza de 0,6 puntos de las cotizaciones, de los que 0,5 puntos son pagados por la empresa y 0,1 por el trabajador.

Así, se recoge que pase de esos 0,6 puntos porcentuales actuales a 1,2 puntos porcentuales en 2029, al ritmo de una décima por año, en aras de "reforzar el sistema durante los años en los que puede haber una mayor tensión por la jubilación de la generación del ‘baby boom’".

Junto a estas medidas para reforzar ingresos, la reforma establece una senda de subida de las pensiones mínimas contributivas para asegurar que converjan con el 60 % de la renta mediana. Para ello, se toma como referencia la evolución de la pensión mínima con cónyuge a cargo, que alcanzaría entre 2024 y 2027 el 60 % de la renta mediana correspondiente a un hogar de dos adultos. Se establece un proceso similar para la evolución de las pensiones no contributivas, que crecerían hasta converger en 2027 con el 75 % del umbral de la pobreza calculado para un hogar unipersonal.

VALORACIÓN DE LOS AGENTES SOCIALES

El texto no es definitivo. Los sindicatos ven aceptable la propuesta del Gobierno para reformar las pensiones, aunque después de la reunión de esta tarde, han pedido el fin de semana para analizarla y volverán a verse las caras el próximo lunes. El objetivo principal de este cambio es aumentar los ingresos que recibe el sistema para que sea sostenible. Para inyectar más ingresos en el sistema y hacer frente al envejecimiento de la población, se van a incrementar las bases máximas de cotización y también plantea una cuota de solidaridad para los salarios mas altos que actualmente no cotizan al completo.

Por contra, todas las organizaciones empresariales rechazan de plano la idea del ministro Escrivá. Hablan de frontal oposición y acusan al Gobierno de voracidad recaudatoria, como ha declarado Lorenzo Amor, vicepresidente de la CEOE y portavoz de los autónomos.

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