El estadio se rinde al camero, que, muy emocionado, aseguró que vive "un sueño que se ha hecho realidad". Fue homenajeado por figuras del sevillismo como Blanco, Caparrós o el capitán Jesús Navas y estuvo en todo momento acompañado de su mujer, Pilar Rubio, y sus cuatro hijos.
El estadio Ramón Sánchez-Pizjuán se rindió en la noche de este miércoles al central internacional Sergio Ramos en un acto que concentró a algo más de 20.000 aficionados en sus gradas, en las que disfrutaron con la presentación de este futbolista, que regresa al Sevilla, el club en el que se formó y con el que debutó en la élite, después de dieciocho años de su marcha para una dilatada carrera en el Real Madrid y después en el PSG francés.
El camero, de 37 años, fue presentado en la sala de prensa del estadio sevillista en presencia del presidente del Sevilla, José Castro, y el director deportivo de la entidad, Víctor Orta, para después, ya vestido de futbolista y con el número cuatro como dorsal, saltar al césped, donde fue ovacionado por esos mas de veintidós mil seguidores, según las cifras facilitadas por el propio club.
Sergio Ramos, que firmó por el Sevilla por una temporada el pasado lunes y que lleva dos entrenamientos ya a las órdenes de José Luis Mendilibar, estuvo siempre muy emocionado al recordar su pasado en el club hispalense y en todo momento acompañado de su mujer, Pilar Rubio, y sus cuatro hijos.
El central recibió palabras de elogio sobre el terreno de juego de Pablo Blanco, exjugador sevillista y desde hace muchos años coordinador de la cantera del club; de Joaquín Caparrós, quien fue el entrenador que le dio la oportunidad de debutar en Primera División; o de Jesús Navas, actual capitán de la plantilla y compañero de cantera además de también campeón con él con la selección española en el Mundial de Sudáfrica.
Por los vídeos marcadores participaron otros como los también centrales que dejaron huella en el Sevilla, caso de Javi Navarro o Pablo Alfaro, y todo ello ante los vítores y aplausos de los asistentes a un acto que acabó con el lanzamiento de balones a las gradas y la vuelta de honor de homenajeado para repartir autógrafos y posar en fotografías.
La vuelta de Sergio Ramos al Sevilla ha estado también rodeada de polémica a tener en contra a un sector de la afición por diversas polémicas que se suscitaron durante su etapa como futbolista del Real Madrid, por lo que, antes de la presencia de jugador sobre el césped, se escucharon algunos gritos de desaprobación contra los dirigentes del club, aunque estos ya no se escucharon cuando saltó el central al terreno de juego.
El futbolista español Sergio Ramos admitió sentirse aún "querido" por la afición del Sevilla FC "pese a todo lo que ha pasado" en los últimos años con ciertas desavenencias, tras haber sido arropado este miércoles por más de 22.000 personas en el Estadio Ramón Sánchez-Pizjuán durante su presentación como nuevo jugador sevillista.
"Es un día muy especial y emotivo. Han pasado muchos, pero como el día que debuté aquí, hoy vuelve a ser un día especial, en el que vuelvo a casa. Me sigo sintiendo querido pese a todo lo que ha pasado y quiero dar las gracias por permitirme sentirme querido en esta vuelta", comentó Ramos desde el césped del estadio.
"Quiero aprovechar para volver a dar las gracias a todas las personas que han hecho posible que pueda volver a defender este escudo. He celebrado desde fuera todos los títulos del club y somos uno de los grandes equipos de Europa. Para terminar querría repartir este momento mío de felicidad de la forma más sincera. Soy sevillista y vengo a matar por este escudo", indicó el futbolista de Camas.
Tras más de media hora de atención a periodistas, Ramos dejó la sala de prensa y se vistió de corto para salir por el túnel de vestuarios. Desde primera hora de la tarde habían hecho cola esos más de 22.000 sevillistas para asistir a la presentación. No en vano, Ramos ha vuelto 18 años después al club donde se formó como canterano.
En dicha rueda de prensa, el camero analizó su estado físico tras militar dos años en el Paris Saint-Germain. "La verdad es que me encuentro muy bien físicamente, pero necesitaba oler a hierba y volver a entrenar con mis compañeros, esa adaptación que realmente te da el campo. Y eso por mucho que entrenes, si no vuelves a un equipo... pues obviamente lo pierdes", argumentó.
"Ahora ya llevo dos días con el equipo entrenando y físicamente me encuentro bien. Pero poco a poco iré encontrando mi mejor versión física para estar cuanto antes. Tampoco tener prisa, pero cuanto antes estaré disponible", auguró Ramos antes de abrir la puerta a su posible regreso a una convocatoria de la selección española.
"De cara a la selección como bien sabéis, hace un año tomé una decisión porque, como dije en su día, el fútbol a veces no es solo fútbol. Y si las circunstancias se dan, pues quién sabe. Ya sabe todo el mundo lo que significa para mí representar a mi país. Y bueno, ya se verá. Ahora sinceramente estoy muy centrado en empezar con mi equipo, en acumular partidos, en acumular sensaciones y bueno, si las cosas y las circunstancias cambian, ¿por qué no?", señaló al respecto.
Sobre el césped del Sánchez-Pizjuán, estuvo acompañado por su esposa Pilar Rubio y sus cuatro hijos. Junto a ellos aparecieron Pablo Blanco, Joaquín Caparrós y Jesús Navas, tres personas muy importantes en la trayectoria deportiva del camero. "Sergio llegó a la ciudad deportiva una tarde de abril, en etapa alevín. Nos sorprendió su carácter competitivo y su personalidad", recordó Blanco.