El cuadro bético no puede permitirse otro tropiezo en la Europa League dada la igualdad del que parecía a priori un sencillo grupo.
El Betis visita en la tercera jornada de la Europa League al teóricamente rival más débil del grupo C, el Aris Limassol. No obstante, ahora mismo está el mundo al revés y el equipo chipriota es el líder y el Betis el colista, eso sí, en una clasificación en la que los cuatro equipos tienen tres puntos merced a una victoria en las dos jornadas disputadas.
A pesar de la debilidad del rival, el Betis no se puede fiar porque este equipo le ganó al Rangers (2-1) en este mismo escenario, el que fuera verdugo de los verdiblancos en la primera jornada, y perdió solo por un escaso margen de un gol en su visita al Sparta de Praga al que le hizo dos tantos (3-2). De hecho es muy buen equipo en las transiciones rápidas y ahí es, por la velocidad de sus futbolistas más ofensivos, donde más daño hace.
El equipo verdiblanco tiene de nuevo en la parte de atrás los problemas, para empezar por falta de efectivos, algo que parece estar dispuesto a solucionar antes de la llegada del mercado invernal con el fichaje de algún futbolista en paro, tal y como permite el reglamento.
El Betis ha viajado con 22 futbolistas entre los que llama la atención la presencia de dos canteranos Enrique Fernández y Ginés Sorroche. El primero es un pivote y el segundo es el delantero del filial. También son novedad respecto al último partido de liga Guido Rodríguez y Willian José. Los dos cumplieron sanción y ya pueden volver a ser importantes para Pellegrini.