El primer partido de la selección española en Sevilla se disputó en 1923 y la primera derrota del combinado nacional en la capital hispalense no se produciría hasta 1991 contra Francia (1-2).
La selección española vuelve a jugarse el pase para una gran cita en Sevilla, su ciudad talismán, y ya son varias veces. Es una historia que se repite basada en una leyenda que nació aquí, la del jugador número 12, ese que ha llevado siempre en volandas a un equipo que estuvo casi 70 años sin perder en tierras hispalenses.
Una leyenda que se inicia con el estreno en Sevilla de la selección en un partido disputado en el estadio Reina Victoria contra Portugal que se saldó con un contundente 3-0. A partir de ahí todos los partidos se saldaron con victorias salvo un empate frente a la URSS en los años 70.
Y en ese periodo, gestas como el 12-1 a Malta en el Benito Villamarín que dio la clasificación a la Eurocopa de Francia de 1984 en la que nos quedamos a las puertas del triunfo ante la anfitriona o el 1-0 a la Dinamarca de los Laudrup en el Sánchez Pizjuán con el gol de Hierro en inferioridad numérica que sirvió para estar en el Mundial de Estados Unidos en el año 1994.
La primera derrota llegaría 68 años después, en 1991, frente a Francia 1-2 en el Villamarín que nos cerró la puerta de la Eurocopa de 1992. No obstante, queda el estadio sevillista como el único donde España nunca ha perdido.
España era en aquellos tiempos sede oficial de la selección, unos años dorados que se agotaron hasta la vuelta al nuevo estadio La Cartuja donde España incluso ha tenido su sede durante la última Eurocopa y donde ahora se plantea una nueva gesta, la de estar en el Mundial de Qatar, eso sí con un jugador más, el número 12, la afición.