"Me quiere matar, avisa a la Policía": los 13 días de calvario de una madre y sus dos hijos
Detenido en Málaga el hombre de 24 años que secuestró a su exmujer y a sus dos hijos pequeños en Francia.
Por el camino, maltrataba a los niños y abusaba sexualmente de la mujer.
"Me quiere matar. Solo la Policía puede salvarnos". Es el mensaje que emitió a su entorno una mujer francesa de 23 años secuestrada en un coche durante 13 días junto a sus dos hijos, de 1 y 3 años, por su expareja y padre de los niños.
La Policía ha puesto fin en Málaga al calvario sufrido por la joven. Por el camino, el hombre maltrataba a sus hijos y abusaba sexualmente de la mujer.
El hombre, de 24 años, con antecedentes por malos tratos y quebrantamiento de condena y una orden de alejamiento en vigor de su expareja, ya está en prisión por delitos de homicidio en grado de tentativa y de agresión sexual agravada y continuada. La mujer y sus hijos se recuperan después de 13 días viviendo en un vehículo y tras más de 2.000 kilómetros, de Francia a Málaga, en los que ella conducía a punta de cuchillo. La investigación apunta a Argelia como lugar de destino.
Diez días antes del SOS lanzado por la mujer en un descuido de su secuestrador, el hombre recoge en Francia a sus hijos -una pequeña de 1 año y otro de 3-, pero la madre se sube también a bordo del utilitario porque esa es la "condición" para que él pueda ver a los menores.
Lo que sucede a partir de ese día, el 3 de octubre, es, en palabras del comisario jefe de la Brigada Central de Unidad De Familia y Menor (UFAM) de la Policía Nacional, Javier de Pedro, la historia de una "huida muy peligrosa" y también el relato de una investigación frenética a contrarreloj.
Obligada a conducir durante más de 2.000 kilómetros, amenazada con un cuchillo, agredida sexual y físicamente de manera repetida delante de sus hijos y con el cuerpo repleto de hematomas, mordiscos y picaduras de insecto, la mujer recorre desde Francia varias ciudades como Barcelona y alguna de Portugal hasta llegar a Málaga.
Las sospechas de los investigadores, una vez resuelto el secuestro, es que el agresor pretendía salir de España, posiblemente a Argelia, un destino que ven inviable, pues sobre él, que no lleva pasaporte, ya pesa una orden de detención, por lo que es prioritario encontrarle para evitar un desenlace fatal.
Ella no tiene móvil porque él se lo rompe al cruzar la frontera en Francia, tampoco puede salir del vehículo, donde alimenta a sus hijos con galletas, atún y pan que compra su carcelero en áreas de servicio.
Es en una de estas salidas cuando él se deja su móvil y la mujer aprovecha para escribir unos mensajes de auxilio a una persona conocida que cumple con lo que la joven le pide y avisa a la policía francesa que da la alerta a España.
A partir de ahí, los agentes de la UFAM, asegura su jefe, trabajan sin descanso durante 72 horas para encontrar ese coche.
Finalmente, la tarde del 16 de octubre la Policía localiza el vehículo lleno de suciedad en el paseo marítimo de Málaga y logra sacar del coche a los niños y a la madre.
