Los estruendos provocan un gran sufrimiento a los animales
La costumbre de usar pirotecnia ruidosa en Navidad es muy dañina para la mayoría de las mascotas. Los perros y los gatos tienen un oído más sensible y ese ruido intenso les provoca mucho sufrimiento.
Los fuegos artificiales y los petardos producen pánico, estrés y daños auditivos y en el peor de los casos a nuestras mascotas.