Los vecinos de esta pedanía onubense pudieron volver en la tarde noche del viernes a sus casas después de que los técnicos lograran garantizar la seguridad del embalse.
Con aplausos agradecieron a agentes de la guardia civil y el 112 sus esfuerzos.
Los 105 vecinos de la pedanía Cueva de la Mora, perteneciente a Almonaster La Real que el miércoles fueron desalojados de manera preventiva tras detectarse una grieta en el embalse Monte Félix-El Toril han regresado ya sus casas después de que las medidas extraordinarias puestas en marcha para bajar el nivel del agua y reducir la presión sobre el muro hayan dado su fruto.
Durante la tarde noche, los vecinos han ido volviendo a sus casas. La dirección de la Agencia de Emergencias les han informado en primera persona de los trabajos realizados. Los vecinos han respondido con aplausos de agradecimiento por el trato recibido tanto a los agentes de la Guardia Civil como del 112 que han colaborado en las tareas.
El consejero de la Presidencia ha informado de que esta decisión va a motivar la reducción del Plan de Emergencias por Inundaciones (PERI) a situación operativa cero para vigilancia y control.
Los vecinos evacuados han pasado estos días en casas de familiares y amigos de Almonaster, así como establecimientos hosteleros de la zona facilitados por el consistorio.
Asimismo, el centenar de personas desalojadas ha contado con el soporte y apoyo logístico de Cruz Roja, activada por la EMA para atender todas sus necesidades e incluso pudieron regresar en pequeños convoyes para alimentar y asistir a sus animales, recoger mascotas y medicamentos, acompañadas por la Guardia Civil.
Sanz ha detallado que sobre el terreno han estado operando hasta 11 bombas y autobombas pesadas de extracción que han llegado a evacuar del embalse más de dos millones de litros de agua a la hora.
Esta medida, unidas las llevadas a cabo para llegar a la antigua válvula del fondo y abrir tres tuberías inferiores, junto a la limpieza y apertura del aliviadero izquierdo, y otras medidas estructurales han permitido bajar el nivel del agua y reducir el riesgo.
Entre el mediodía y la tarde el agua ya se encontraba por debajo de los aliviaderos y el agua ha seguido descendiendo, por lo que se ha logrado revertir la presión sobre el muro.
Ante esta situación, la Consejería de la Presidencia ha descendido el PERI a fase de preemergencia, situación operativa 0, lo que quiere decir que se va a seguir trabajando con las 11 máquinas de extracción, al menos hasta las 10.00 horas de mañana, y que se sigue haciendo una vigilancia y monitorización de la situación.
El consejero de la Presidencia ha elogiado el “enorme trabajo realizado por los especialistas de la EMA y de la Dirección General de Infraestructuras del Agua para resolver una situación de gran complejidad en el menor tiempo posible y con todas las garantías de seguridad y eficacia”.
Sanz también ha resaltado la utilidad y eficacia de los datos aportados por los vuelos del dron que se han estado realizando durante todas las labores y que han enriquecido el análisis y la toma de decisiones.