Piel biofabricada

Un dispositivo portátil que permite aplicar biotintas sobre heridas de la piel para así acelerar su regeneración. Puede sonar a ciencia ficción pero es ya una patente en la que han trabajado investigadores de las universidades de Granada y Jaén.

La epidermis es la capa visible y externa. Por debajo la dermis y la hipodermis conforman nuestra piel. Un órgano que protege de agresiones externas y patógenos, garantiza nuestra regulación térmica y nos permite sensaciones múltiples. Su integridad puede estar amenazada por lesiones o heridas con una capacidad de regeneración limitada. ¿Se puede acelerar esa recuperación con materiales diseñados en laboratorio que imitan a la naturaleza?

El equipo que dirige Juan Antonio Marchal desde la Universidad de Granada y el Instituto de Investigación Biosanitaria lleva años colaborando con investigadores de la Universidad de Jaén, la de Coruña y la empresa Bioibérica en el desarrollo de un dispositivo para aplicar biotintas. Así se llama a un conjunto de materiales biológicos y células en forma de fluido que pueden formar geles y adoptar una estructura tridimensional viva.

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