José Bejarano, Asociación de Periodistas Solidarios

Todo comenzó con la muerte del joven Laovo, un inmigrante que murió en un cayuco cuando intentaba una vida mejor. Pepe Bejarano conoció a su hermano cuando andaba buscando su cuerpo en el depósito de cadáveres de Tenerife.

La situación le impresionó y quiso saber la historia detrás de este intento. Lo planteó en La Vanguardia, periódico del que era delegado en Andalucía y le dieron el visto bueno.

Él y Emilio Castro, fotógrafo, se fueron once días a la aldea situada en Guinea Bissau, entre los diez países más pobres del mundo. Volvieron impactados de la situación y se pusieron en marcha, primero hicieron una escuela, un centro de salud, otro colegio, cooperativa, granja, pozos y una radio de mujeres.

Y desde entonces no han parado porque, como dice Pepe, cualquier aportación les ayuda. Van dos veces al año para el seguimiento del proyecto, ya han enviado tres contenedores con diverso material y maquinaria y además han realizado una serie de documentales llamados África, con la colaboración de Canal Sur. Y el título no es baladí porque es la mujer la base fundamental de Guinea y también de este proyecto de los periodistas solidarios,