El espíritu navideño invade el plató del concurso, donde Antonio Garrido reparte sonrisas, emociones y grandes premios.
En estos días navideños, hay un presentador especialmente contagiado por la magia de la Navidad. Su nombre es Antonio Garrido y su programa, “Sopa de Letras”, suena más que nunca a villancicos y campanas de bote, anunciando la llegada de premios muy especiales.
Como es habitual, dos parejas de concursantes se enfrentan cada día al tablero del programa, buscando las palabras que les permitan superar las pruebas y alcanzar el ansiado triunfo final. Una de ellas es ya todo un clásico del concurso: Zipizape. Bea Arjona y Julián Astorga, amigos y músicos de Archidona, han batido el récord de permanencia y afrontan su cuarta semana en plató, con más de 2.000 euros acumulados y la ilusión de cumplir su sueño de viajar juntos al parque temático de Harry Potter.
Frente a ellos llegan con fuerza las Jartibles, un nombre que define perfectamente su carácter. María y Elisa Mesa, primas, vecinas de Montequinto (Sevilla) y compañeras inseparables, se han propuesto disfrutar al máximo de la experiencia televisiva. María es ama de casa y Elisa trabaja como dependienta, y ambas aseguran que, si consiguen los 10.000 euros, lo celebrarán con una gran escapada junto a sus familias.
¿Logrará el empuje de las Jartibles destronar a los veteranos Zipizape? Aún está por verse. Lo que sí es seguro es que “Sopa de Letras” llega esta semana cargado de emociones, risas y muchos premios. Y es que, según cuentan, Antonio Garrido ya se ha puesto el traje rojo, la barba blanca y ha llenado su saco navideño de miles de euros para repartir ilusión entre los concursantes.