Estos han sido encontrados en el desierto de Gobi, en Mongolia. Se trata de un hallazgo realmente sorprendente, en especial por el formidable estado de conservación en el que las muestras se encuentran. La extremidad, de casi 30 centímetros de longitud, presenta la queratina como su principal material de composición, del mismo del que están hechas las uñas. Su vaina parece indicar que la propia garra era mucho más larga que los huesos de los que surgía. Según los propios responsables de la investigación, es la garra más grande del mundo con esas características.
La especie de dinosaurio al que perteneció ha recibido el nombre de Duonychus tsogtbaatari, conmemorando la figura del paleontólogo mongol Khishigjav Tsogtbaatar, haciendo referencia además a su representativa garra doble. Pertenece al grupo de dinosaurios conocidos como terizinosaurios, en el que también se encuentra el emblemático Tyrannosaurus Rex.