En Madrid ha quedado suspendido el juicio de los bebés robados por la incomparencia del acusado, el médico Eduardo Vela que según su abogado ha tenido que ser trasladado a un vcentro de urgencias al sufrir mareos y dolores. La Sala dispone ahora de 30 días para señalar la fecha que cierre el primer juicio por un caso de bebes robados en España.
En la mañana del miércoles, el doctor Eduardo Vela ha tratado de acudir al juicio pero su situación se ha agravado con "nuevos mareos y dolores en el costado", por lo que el doctor ha llamado al 112 y a su centro de salud aunque, según su letrado, no le podían dar atención ni asistencia.
De esta forma, sus familiares le han llevado directamente a urgencias, desde donde Vela ha informado "telefónicamente" a su letrado de que "estaba siendo atendido".
El letrado Rafael Casas ha justificado este relato al tribunal con un 'pantallazo' del justificante de ingreso en urgencias en su móvil, sin entregar físicamente ningún documento médico.
Tras escuchar a las partes, la magistrada presidenta ha propuesto celebrar la videoconferencia prevista y suspender tras ello la vista, pero la defensa se ha opuesto, por lo que ha dado un plazo de tiempo para ver como evolucionaba Vela a lo largo de la mañana.
Una hora después, el tribunal ha confirmado la suspensión definitiva. Ahora se abre un plazo de treinta días para señalar la fecha para celebrar esta última sesión, aunque las magistradas no descartan incluso retomar el juicio la próxima semana.
La suspensión ha provocado la indignación entre los afectados. Temen que pase lo mismo que con Sor María, fallecida estando imputada en el supuesto robo de dos niños.
La suspensión no ha afectado a Inés Madrigal que ha confesado a los medios que se mantiene "muy positiva" ante el aplazamiento del juicio, porque esto supone que "se va a seguir hablando de bebés robados".
Además, ha considerado que la actitud de la defensa demuestra que quiere evitar el testimonio que estaba previsto para hoy de las dos periodistas francesas que, según Inés, en 2013 grabaron con cámara oculta al doctor Vela reconocer que había hecho entrega del bebé, porque "algo ocurrirá" cuando ellas hablen.
El letrado de Inés que ejerce la acusación particular, Guillermo Peña, ha tildado de "maniobra dilatoria y de mala fe" la actuación de la defensa que, en su opinión, solo busca la disuasión de los testigos que no les convienen que declaren, como estas periodistas.
Y ha considerado "curioso" que en Madrid no haya servicios de emergencias dispuestos a atender a "un señor de 85 años que dice que se marea y que se cae", tal y como ha argumentado la defensa en el juicio, aunque ha aclarado que si el tribunal no ha cuestionado este extremo, no lo hará él.
Minutos antes que ellos y cuando la jueza aun no había dado por suspendida la vista de manera definitiva, el abogado de Vela, Rafael Casas, ha abandonado la Audiencia y ha negado a los medios que la no asistencia de su representado se deba a una "estrategia judicial", ya que lo cierto es que esta mañana, Vela no se tenía "en pie".
Este miércoles estaba previsto continuar con la segunda y última sesión del juicio que comenzó ayer contra Vela, para quien la Fiscalía pide 11 años de prisión por participar en el robo de Inés Madrigal, que nació en 1969 y fue sustraída de su madre biológica y entregada a una mujer estéril, a quien Vela le había recomendado fingir un embarazo con cojines. La acusación solicita 13 años de cárcel.