La princesa de Gales anuncia que tiene cáncer
Catalina, de 42 años, ha explicado que está recibiendo tratamiento de quimioterapia.
Asegura que lo más difícil ha sido explicar la situación a sus tres hijos.
La princesa de Gales, Catalina, ha salido al paso de los rumores desatados en torno a su salud y ha anunciado en un video que está recibiendo tratamiento contra un cáncer que le fue detectado tras someterse a una cirugía abdominal en enero.
En el mensaje, de dos minutos y grabado en un banco al aire libre, Catalina aparece con la melena suelta y un suéter a rayas, más delgada de lo habitual y con un rictus cansado pero sonriente.
En el vídeo, no esconde la gravedad de la situación ni el desafío que le ha supuesto a nivel personal y familiar, pero se esfuerza por mandar un mensaje de tranquilidad: "Estoy bien y poniéndome cada día más fuerte al centrarme en las cosas que me ayudarán a curarme".
Desde hace dos meses, cuando la princesa fue operada y suspendió todos sus actos públicos, han ido creciendo los rumores y las especulaciones acerca de las verdaderas causas del hermetismo que mantenía la casa real británica sobre el estado de la mujer del heredero de la corona. La princesa de Gales es una de las figuras públicas más queridas del país y conocer que, a sus 42 años y con tres hijos de corta edad, debe afrontar esa prueba ha conmovido a los británicos.
"En enero, me sometí a una importante cirugía abdominal en Londres y en ese momento se creía que mi enfermedad no era cancerosa. La cirugía tuvo éxito. Sin embargo, las pruebas tras la operación determinaron que había habido cáncer", explica en el vídeo.
Y añade que tras ello sus médicos le recomendaron someterse a un tratamiento de "quimioterapia preventiva" que, según el Palacio de Kensington, residencia oficial de los príncipes de Gales, comenzó a recibir a finales de febrero.
Al igual que cuando su suegro, el rey Carlos III, anunció en febrero que padece cáncer, de nuevo se omite información importante: qué tipo de cáncer, en qué fase está, cuál es el pronóstico.
Sin embargo, el anuncio ha desatado una corriente de solidaridad con Catalina. Desde el rey, que alabó a través de un portavoz su "valentía" al revelar la enfermedad, al primer ministro británico, Rishi Sunak, que criticó su "injusto tratamiento" durante el tiempo de su ausencia pública, muchas de las mayores personalidades del Reino Unido salieron en apoyo de la princesa de Gales.
Los príncipes de Gales reclaman ahora ante todo privacidad, espacio y tiempo para poder afrontar el proceso de recuperación de Catalina. La princesa ha reconocido que han sido "un par de meses increíblemente duros" para toda su familia, pero que ha contado con un "fantástico equipo médico" que la ha atendido en este tiempo.
En el centro de sus palabras, y también de la decisión de no haber hecho pública la enfermedad hasta ahora, se hallan sus tres hijos, Jorge, de 10 años, Carlota, de 8, y Luis, de 5. "Nos ha costado un tiempo explicarles todo de una manera que fuese apropiada para ellos y les tranquilizara de que estaré bien", se sinceró Catalina, en una especie de confesión sobre el silencio autoimpuesto que tanto ha alimentado la rumorología.
La pareja decidió esperar a que llegasen las vacaciones escolares de Pascua para difundir su estado de salud.
