La ley Trans y la de Familias enfrentan a PSOE y Unidas Podemos
Hasta el punto de que las diferencias entre la parte socialista del Gobierno y la de Podemos resultan insalvables por el momento en el primer caso y ha provocado un retraso en la segunda
La ley Trans y la anunciada Ley de Familias están provocando diferencias en el seno de Gobierno, hasta el punto de que las diferencias entre la parte socialista del Gobierno y la de Podemos resultan insalvables por el momento en el primer caso y ha provocado un retraso en la segunda, anunciada para el consejo de ministros de este martes.
La ministra de Igualdad, Irene Montero, insiste en forzar al PSOE para que la ley permita a los menores, de 14 y 15 años, cambiar su sexo sin autorización judicial. Montero teme que el PSOE se una al PP contra ella. En esta reforma, Podemos tiene de su parte a la mayoría parlamentaria de la investidura para eludir la tutela judicial y deja sin esos apoyos a los socialistas. La respuesta del lado socialista ha vuelto a darla la ministra de Hacienda, María Jesús Montero. El PP de momento dice que a ellos nadie les ha llamado para nada.
El Congreso de los Diputados ha convocado este miércoles la ponencia encargada de redactar el dictamen de la ley trans tras la finalización del Pleno de Control del Gobierno. Esta ley sigue atascada en el Congreso, donde aún no se ha constituido la ponencia, fase previa para el debate y votación en el pleno, y su aprobación corre peligro ante la falta de acuerdo sobre el derecho de los menores de 16 años a cambiar de sexo en el registro.
El PSOE ha expresado su predisposición máxima para negociar y para que salga la ley en el plazo previsto. El grupo socialista mantiene sus enmiendas a la ley trans, que plantean entre otras cosas que un juez tenga que autorizar el cambio de sexo en el registro a los menores de 16 años y mayores de 12, pero ha asegurado que no da por cerrado ningún proceso de negociación después de que la ministra de Igualdad, Irene Montero, afirmara este lunes que no se había logrado el acuerdo entre los socios de Gobierno.
Otro motivo de fricción entre los socios de Gobierno: el Consejo de Ministros no va a estudiar este martes el anteproyecto de la ley de familias en contra de lo anunciado. El ala socialista ha decidido retrasar su aprobación. La noticia la avanzaba anoche Pablo Iglesias en un medio de comunicación. El Ministerio de Derechos Sociales que dirige Ione Belarra de Unidas Podemos ha mostrado su preocupación por los constantes retrasos de esta norma.
La ley tenía previsto incluir un permiso retribuido de cinco días al año para atender a un familiar hasta segundo grado o un conviviente y también un nuevo permiso de 8 semanas para padres y madres que se podría disfrutar de forma continua o discontinua hasta que el menor cumpla ocho años.
También se han apuntado diferencias sobre la propuesta del ministro Escrivá de ampliar a 30 años el periodo de años trabajados para calcular la pensión, pudiendo elegir los mejores 28 años. La propuesta que el Ministerio Seguridad Social ha planteado este lunes a los agentes sociales contempla un cambio progresivo y no de golpe. Pero sí hay prisas por cerrar el acuerdo. El departamento que dirige José Luis Escrivá se ha propuesto cerrar la reforma antes de final de año para poder enviarla a Bruselas.
No gusta la propuesta ni a sindicatos, ni a empresarios ni a Unidas Podemos. La vicepresidenta y ministra de Trabajo Yolanda Díaz ha mostrado su descontento desde Méjico donde se encuentra visitando la feria internacional del libro de Guadalajara.
