Los argentinos vieron cómo le igualaban un 2-0 en el último minuto del encuentro pero luego evitaron la sorpresa en los penaltis, algo que no pudo hacer la gran favorita Brasil, que cayó contra el equipo capitaneado por Luka Modric.
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La selección de Argentina se citó con Croacia en las semifinales del Mundial de Catar tras eliminar este viernes a Países Bajos en la tanda de penaltis (3-4), después de que el meta 'Dibu' detuviera las dos primeras penas máximas y que Lautaro Martínez anotara el definitivo.
Aunque Molina adelantó a la albiceleste en el 35' y Messi puso el 0-2 en el 73', Países Bajos desató la locura tras empatar el encuentro con un doblete de Weghorst. Primero tras un cabezazo en el 83' y después tras finalizar una falta ensayada en el último minuto del descuento que forzó la prórroga.
El post partido ha dejado incendiarias declaraciones de Messi contra el árbitro español Mateu Lahoz del que ha dicho que no estaba preparado para un partido de este nivel y contra el técnico Van Gaal y varios jugadores neerlandeses a los que incluso les negó el saludo y la camiseta después de varias tánganas durante el encuentro y al final del mismo por la provocación en la celebración de algunos jugadores argentinos.
Poco antes, Croacia daba la gran sorpresa del Mundial, superando la de la eliminación de Alemania o España, al dejar en el camino a la máxima favorita, Brasil.
La selección de Croacia fue fiel a sí misma, a su costumbre de que se resuelvan sus eliminatorias en una gran competición internacional en la prórroga o en los penaltis incluso, en los que volvió a sobrevivir por segunda ronda consecutiva tras haber hecho lo propio con Japón.
El conjunto de Zlatko Dalic lo hizo de nuevo. No podía ser de otra forma. Brasil lo intentó guiada por Neymar Jr en el estadio Ciudad de la Educación. Pero se encontró con ese hábito del equipo ajedrezado que capitanea Luka Modric, que se resiste partido a partido a decir adiós a su dilatada trayectoria por la Copa del Mundo.
Fue una partida de ajedrez perfecta del seleccionador croata. Tan solo le faltó más fuelle para llegar ante Alisson Becker y soñar con marcar algún gol. Porque lo que fue estructura defensiva y trabajo solidario fueron irreprochables, tan solo resquebrajado por la doble pared que permitió al delantero del PSG.
Confirmó en dicho encuentro, como en este ante una de las favoritas la título, que sigue empeñado el cuadro balcánico en que las eliminatorias se prolonguen y lleguen hasta el límite. Y la gran fiesta le llegó en el Mundial de Rusia 2018, donde alcanzó la final, por este sistema. Dinamarca y Rusia sucumbieron al influjo de la camiseta ajedrezada en la tanda de penaltis. En semifinales la víctima fue, en la prórroga, Inglaterra, a la que se impuso por 2-1 con un tanto de Mario Mandzukic.
El irreductible equipo de Dalic encaró este Mundial de Qatar 2022 dispuesto a defender hasta la última gota ese subcampeonato. Pasó no sin ciertos apuros la fase de grupos y desde entonces ha demostrado esa capacidad de sufrimiento, esa resiliencia que en el segundo Mundial asiático de la historia no pudo ni siquiera desmontar Neymar que ha dejado entrever que no llegará a la próxima cita mundialista.

Un tanto postrero de Bruno Petkovic mandó la confrontación a los penaltis. El meta Dominik Livakovic salvó el primer tiro del madridista Rodrygo Goes y el palo repelió el último de Marquinhos. Eliminación de Brasil y dimisión de su técnico Tite, que anunció su marcha tras el encuentro y no le tuvieron que echar como a Luis Enrique.