Se trata de un ciudadano francés de 32 años que se suma a una mujer fallecida hace unas semanas.
La imprudencia y el desconocimiento están detrás de los accidentes.
Este miércoles, un ciudadano francés de 32 años se convirtió en la segunda víctima mortal del verano en accidentes con motos acuáticas en Málaga. La falta de conocimiento y de prudencia están detrás de estos accidentes que suelen producirse al coger motos privadas sin limitación de potencia.
Para conducir motos náuticas privadas sin limitación de potencia, bien de manera particular o alquilada por días, hay que poseer un título náutico deportivo que se obtiene aprobado un curso. Ser conscientes del estado del mar es básico.
La normativa de las motos de agua de alquiler es muy estricta. Son los vehículos adecuados para quienes no tienen titulación.
Entre las prohibiciones están no conducir bajo los efectos del alcohol, no acercarse a menos de 50 metros de otra moto, artefacto flotante, boya de señalización de submarinistas, buques o embarcaciones. Se recomienda no practicar este deporte en solitario y llevar siempre puesto el chaleco salvavidas.