Aunque es muy difícil de prevenir, hay una serie de comportamientos que pueden indicar la tendencia al suicidio de algunas personas
El suicidio es el extremo más dramático de las llamadas "conductas autodestructivas". Y ese tipo de conductas son sólo la punta del iceberg. Lo que hay debajo es un proceso psicológico muy complejo. Y aunque no siempre es fácil desentrañar, sí podemos estar atentos a ciertas señales.
La persona con conductas suicidas suele hablar sobre ello. Siente vergüenza, se considera una carga y se muestra triste, ansiosa o desesperanzada. Y es muy común que tenga cambios repentinos de comportamiento o de humor.