Los agricultores de Huelva usan mallas y sondas de humedad para ahorrar agua
Buscan medidas desesperadas para combatir la sequía. A sus sistemas de riego controlado ahora suman estas herramientas alternativas con las que consiguen un ahorro de agua de hasta el 20%
La sequía no da tregua. Es una amenaza cada vez mayor para la agricultura onubense, que frente a los recortes en las dotaciones de agua de riego, y ante la falta de precipitaciones, está tirando de herramientas que permiten optimizar aún más el consumo de agua en los campos. Entre ellas, mallas sobre el terreno que evitan la evaporación y posibilitan ahorros de hasta el 20% o el uso de sondeos de humedad.
Mallas muy presentes en los cultivos de frutos rojos y que hace unos cuatros años comenzaron a probarse en la arboleda. Una alternativa al uso de herbicidas, que asegura la salud de la planta y que se están mostrando muy efectivas frente a la sequía.
Herramientas, como las sondas de humedad también, que propician un mayor rendimiento de los aportes de agua aunque éstos se hayan visto recortados. Recursos que se suman al sistema de riego por goteo, por sectores y a pie de campo con los que las pérdidas de agua son las mínimas .
