Hinojos recaba apoyos para evitar el deslinde de las marismas de Doñana
La Junta, la estación Biológica de Doñana y hasta el Consejo de Participación del parque se han mostrado en contra del deslinde de 8.500 hectáreas porque las marismas no tienen influencia mareal.
Pero el Gobierno dice que la ley es igual para todos.
Hinojos está recabando apoyos para librar una batalla judicial que le permita mantener su marisma en Doñana, cerca de 9.000 hectáreas donde pasta el ganado de ese municipio. Instituciones como la Junta, la Estación Biológica de Doñana, el Consejo de Participación y numerosas firmas de ciudadanos han respaldado que la lucha de este municipio, que posee esa zona una vez que en el siglo 13 se lo concedió el Rey Alfonso X el Sabio.
Ahora el ministerio de Transición ecológica está a punto de culminar el deslinde, argumentando que la ley es para todos y no se pueden hacer excepciones pero organizaciones ecologistas e instituciones argumentan que las marismas no tienen influencia mareal, dicen que no son aguas saladas y que por tanto no son susceptibles de deslinde de dominio público marítimo-terrestre.
El Ayuntamiento de Hinojos defenderá su patrimonio hasta el final, incluso llegará a los tribunales si hace falta. Cuenta con el respaldo unánime del Consejo de Participación de Doñana, donde está presente la comunidad científica de la Estación Biológica, el parlamento andaluz, así como el apoyo de ciudadanos y vecinos.
Es la tercera vez que el municipio de Hinojos se enfrenta al estado para defender su territorio. Las dos anteriores, una a mediados del siglo XX, con el gobierno de Franco, y otra a finales del XIX, salió victorioso. Los hinojeros han mantenido este territorio de forma natural, es el único territorio virgen que queda en Doñana.
La zona a deslindar afecta también a los términos municipales de Almonte y Aznalcázar, pero es Hinojos quien perdería una cuarta parte de su término municipal. La finca tiene un uso ganadero, pastan unas 850 de razas autóctonas como la vaca mostrenca, yeguas marismeñas o la oveja churra que está declarada en peligro de extinción.
El Gobierno ha señalado que los criterios establecidos para aprobar el deslinde de las marismas de Doñana en los términos municipales de Hinojos y Almonte (Huelva) y de Aznalcázar (Sevilla), son "los que establece la legislación de costas y que la Administración tiene obligación de aplicar en toda España", toda vez que ha señalado que este proceso "no implica un cambio respecto a las consideraciones sobre lo que actualmente es la marisma".
