Se trata de un proyecto piloto que será probado en tres parcelas de la finca La Almoraima de Castellar de la Frontera.
Está desarrollado por el centro de Educación Permanente de Tarifa.
Usar alga invasora del Estrecho para combatir la enfermedad de la seca de los alcornoques. Este es el objetivo del proyecto experimental en el que trabaja la sección de Educación Permanente de Tarifa. Están elaborando un fertilizante con estas algas que aplicarán a partir de marzo en árboles enfermos de la finca La Almoraima de Castellar de la Frontera (Cádiz).
Una vez recogidas, las algas son sometidas a un tratamiento y a un proceso de fermentación que las convierte en fertilizante con propiedades fungicidas sobre el oomiceto, el microorganismo que daña el árbol.
En los ensayos previos, las alumnas Mari Luz Caballero y Luz Pelayo constataron que dicho patógeno funciona como un alga y que es efectivo en alcornoques sanos.
Ahora probarán si es eficaz contra la seca, la enfermedad que desde hace años afecta gravemente a la masa arbórea. Los ensayos se desarrollarán en tres parcelas de la finca pública La Almoraima, en Castellar.
No tendrá aprovechamiento comercial. Pero ya sería suficiente victoria que el mar pueda curar el monte y de paso librar al primero de la plaga de la rugulopterix okamurae. En un año se conocerán los resultados.