El petrolero fue secuestrado este miércoles por varias de las personas que habían sido rescatado en el mar.
No querían ser devueltos a Libia de donde habían partido.
El buque "Hiblu I" había rescatado a 108 migrantes, entre ellos varios niños y 31 mujeres, que navegaban en un barco en malas condiciones frente a las costas de Libia.
Poco después el capitán comunicó que "no tenía el control de la embarcación y que varios migrantes le obligaron y amenazaron a él y su tripulación para que se dirigieran a Malta", según comunicaron las Fuerzas Armadas de Malta.