Andalucía en Semana Santa

La gesta de Rafael Blanco que salvó de las llamas al Cristo del Cachorro

El protagonista de esta heroica historia, que logró salvar un icono de la Semana Santa de Andalucía y fuerza devocional de nuestra tierra, falleció hace cuatro años. Nos citamos en la puerta del templo con su hijo.

Sin embargo, en aquel lamentable siniestro, la Virgen del Patrocinio quedó reducida a cenizas.

En el segundo vídeo ¿qué hay de verdad en la leyenda? ¿es original o una copia el Cristo del Cachorro? 

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CANAL SUR MEDIA 1 abril 2021

Un día muy triste de la historia reciente de la Hermandad del Cachorro fue el 26 de febrero de 1973, un incendio fortuito se originó en la capilla. Fue el bullicio que se formó en la calle Castilla, gente corriendo, llorando y gritando "El Cachorro se quema", lo que conmovieron a Rafael Blanco Guillén, trabajador de un polvero frente al templo. Este joven de Alcalá de Guadaíra no se lo pensó dos veces y se encaramó al balcón, trepando unos cuatro o cinco metros, rompió los cristales y una vez dentro, logró apagar las llamas que afectaban a las piernas del Cristo de la Expiración con el agua de un jarrón. Por la Virgen del Patrocinio no pudo hacer nada. 

Rafael era miembro de la Junta de la Hermandad del Cautivo de Alcalá de Guadaíra, su pueblo natal. Antes del incendio, nunca había entrado en el Cachorro. Desde ese día nació en él una devoción y un orgullo por el Cristo de la Expiración. Todos los detalles de su gesta nos lo relata el hijo, Rafael Blanco García, a las puertas del templo.

Fotografía de Rafael Blanco con su hijo.

El portentoso crucificado sufrió daños graves. A raíz del incendio surgió la leyenda que decía que el Cachorro quedó en muy mal estado y la hermandad mandó a hacer una copia ¿Qué hay de verdad? ¿Es el Cachorro auténtico? Hablamos con el hermano mayor de "El Cachorro", Marco A. Talavera, que asegura que estamos ante el Cachorro de Antonio Ruíz Gijón de 1682. Es el último Cristo del barroco sevillano. El autor era de Utrera y también talló el paso del Gran Poder.

También conocemos el sistema de seguridad que creó la hermandad tras el incendio: un telón cortafuegos protege a las imágenes de las llamas, robos, e incluso terremotos.

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