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La primavera se manifiesta colorida en los desiertos de Almería gracias a la lluvia

El desierto de Almería se ha revestido de verde esta primavera y la agricultura tradicional de naranjos que lo rodea se ha surtido de un caudal inusual que no se veía en los últimos treinta años.

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14 mayo 2022

El agua que ha caído en la primavera, por encima de los 300 litros en Almería ha provocado una eclosión de color y vida en el desierto semiárido de Almería. En unos días, llovió tanto como todo el año anterior y no se veía tanta agua desde 1989.

Estas ramblas, ríos y arroyos siempre están secos, tienen aguas subterráneas, pero este año duplican su presencia y beneficiarán a los agricultores.

El efecto para el sistema semiárido ha sido muy positivo. Los acuíferos se recargarán aunque no de forma inmediata, la tierra de Almería es tan agradecida que se reverdece con las primeras lluvias, más por la zona más árida entorno al desierto de Tabernas.

Y es que esta parte de Almería aún conserva el atisbo de agricultura tradicional frente a la eclosión de los invernaderos que ha inundado la provincia.

El aprovechamiento y la tecnología es el orgullo de Almería pero se aplica con mucha investigación en la zona invernada con técnicas pioneras en sus 30 mil hectáreas de invernaderos.

Pero el curso del Río que en la antigüedad llevaba agua y en los últimos años no, tiene una historia conocida que se remonta a 5 mil años atrás en la Prehistoria. La civilización de Los Millares que se inició en Almería, al albor del río crecieron ciudades medievales como la Antigua Bayyana en Pechina, o la musulmana y luego cristiana, Almería. Se nutre del agua de 3 sierras Gádor, Nevada y Filabres. Es la comarca del Bajo Andarax que deja un corredor de vida por el desierto.

Eje social que hace que se aprovechen las aguas, que no siempre pueden verse en la superficie. A veces se extraen de hasta 200 metros de profundidad, cuando llueve poco. El sistema es simple y laborioso a base de boqueras, partir el agua del río: partidores y acequias y galerías drenantes.

Este año el río lleva agua procedente de la nieve. Se ve porque es agua clara. Es algo que sucedía antes... en los últimos años las Ramblas y ríos bajaban secas por falta de lluvia. Es por esto que los cauces de los ríos en Almería salvo ahora no suelen llevar agua.

Las galerías del Río que recogen agua subterránea son de la Edad Media. Pero con las lluvias de este año se ha producido la paradoja de que han llegado hasta el mar, algo nada habitual.

Los expertos de la Universidad evalúan si hay o no cambio climático. Lluvia, granizo o calima, han hecho que en tan sólo unos días el pantano de Cuevas del Almanzora pase de 11 a casi 40 hectómetros cúbicos. El desierto está verde y también el Cabo de Gata, ante las variables del clima lo mejor es preparar fuertes infraestructuras agrícolas, sobre todo para los invernaderos.

En cualquier caso, esta primavera hemos visto el desierto de Almería más verde que nunca, el Cabo de Gata, acuíferos y agua por las Sierras de Almería, belleza que en los próximos días con el sol supondrá una eclosión de vida y de color que alegrará nuestro horizonte, al menos, el cercano.