La reforma de la ley pone a prueba la salud de la coalición

La portavoz del Ejecutivo, Isabel Rodríguez, ha señalado este martes, tras ser preguntada por la brecha abierta en el seno del mismo por la reforma de la ley del "solo sí es sí" emprendida en solitario por el PSOE, que "este Gobierno merece la pena", sigue trabajando con "normalidad" y "todavía tiene mucho trabajo por hacer".

En rueda de prensa tras el Consejo de Ministros, Rodríguez ha insistido en que "es mucho más importante todo lo que el Gobierno está haciendo para la transformación del país (...) y que siga estando en manos de un gobierno que trabaja para la mayoría", que las manifestaciones públicas que se puedan realizar por una u otra parte.

Fuentes de Moncloa han recalcado que es posible seguir conviviendo con Podemos en el seno del Gobierno y que hay ejemplos suficientes de diferencias a lo largo de la legislatura de situaciones similares pese a las cuales siguen juntos.

Las mismas fuentes han indicado que hay que naturalizar que las leyes pueden dar problemas no deseados ante los que hay que reaccionar, con una propuesta solvente desde el punto de vista jurídico y técnico, y han dejado claro que es la determinación del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, hacerlo y se va a hacer.

La portavoz del Gobierno ha insistido, por su parte, en que están de acuerdo en que se trata de una buena ley, una ley "icónica" que ha generado "efectos indeseados" que hay que corregir y que el consentimiento debe seguir en el centro, como hace, ha insistido, la reforma propuesta por Justicia y el grupo socialista.

"El consentimiento es el eje de la ley y no se toca ni una coma; y creemos que lo que hay que hacer es endurecer las penas", ha resumido, convencida también que no habrá nuevas revisiones de condenas.

La portavoz ha afirmado que el objetivo de la reforma es "dar respuesta a las víctimas que como consecuencia de la aplicación de esta norma han visto incrementado el sufrimiento" y "dar tranquilidad" ante la "alarma social" que ha generado las rebajas de penas.

El objetivo ahora en el Congreso es conseguir "el máximo de votos posibles" a la iniciativa, ha señalado Rodríguez, que ha priorizado el acuerdo con los grupos que conforman el bloque de la investidura y ha destacado su "escepticismo" con respecto a la posición del PP, que, ha recordado, no apoyó la ley.

NUEVA OLEADA DE REVISIONES DE PENAS

El Ministerio de Igualdad ha alertado de que la reforma de la Ley del 'solo sí es sí' registrada este lunes por el PSOE en el Congreso de los Diputados implicaría "una segunda ola de revisiones".

"Puede dar lugar a revisiones de tribunales que hasta ahora no se han revisado. No es cierto que la propuesta del PSOE vaya a blindar frente a revisiones que tendrían que estar terminando, no se puede permitir que vuelva a empezar una segunda ola de revisiones", ha manifestado en declaraciones a los medios la delegada del Gobierno contra la Violencia de Género, Victoria Rosell.

En este contexto, Rosell ha mostrado su "preocupación" debido a que ante un modelo de consentimiento "se introduzca de nuevo la violencia, la intimidación, que responden al modelo del 'no es no'". "Hemos hecho la propuesta de que la violencia e intimidación sea un agravante. La propuesta de volver al viejo sistema que no ha funcionado nunca nos parece que sería un retroceso", ha defendido.

Para la delegada del Gobierno contra la Violencia de Género, volver a introducir un subtipo en el artículo del consentimiento de la ley "es vuela al sistema anterior", lo que supone un "riesgo en revisiones futuras" de condenas.

Asimismo, Rosell ha criticado que hay una "divergencia" en la aplicación judicial de la Ley del 'solo sí es sí' que es "lamentable" y ha incidido en que la responsabilidad de la aplicación de la norma "es de cada tribunal". "Me parece llamativo que nos digan si la vamos a aplicar de una u otra manera", ha dicho.

LOS DETALLES DE LA PROPUESTA SOCIALISTA

La iniciativa socialista modifica las penas para todos los supuestos de agresiones sexuales con violencia o intimidación. El texto registrado implica volver en esos casos, al marco de penas que había antes de entrar en vigor la norma.

Ahí es donde se estaban produciendo la mayoría de las rebajas de penas a los agresores sexuales. Además, este incremento de penas se aplica también en los casos cometidos sobre una víctima que tenga su voluntad anulada por cualquier causa, por ejemplo sumisión química que con la Ley anterior al "solo sí es sí", se consideraba un abuso y tenía una pena más baja.