Las organizaciones que agrupan a empresarios y autónomos, CEOE, Cepyme, y ATA han publicado un comunicado conjunto desmarcándose del paro. Aseguran que agravará la situación de empresas y ciudadanos
La Federación del Transporte también anunció este miércoles que no secunda la movilización. La decisión se tomó por unanimidad en asamblea
El paro indefinido del transporte previsto para la madrugada del domingo al lunes y que ha sido convocado por la misma plataforma que el registrado el pasado marzo, ha logrado poner de acuerdo al Gobierno y a las asociaciones mayoritarias del sector, que lo rechazan de forma casi unánime.
La organización convocante es la Plataforma para la Defensa del Sector de Transporte de Mercancías por Carretera, integrada en su mayoría por autónomos y pymes, cuyo número no ha querido desvelar y que no está representada en las grandes patronales ni en el órgano de interlocución oficial con el Gobierno, el Comité Nacional del Transporte por Carretera (CNTC).
Las organizaciones miembros del Departamento de Mercancías de la CNTC han reiterado este miércoles, por unanimidad, su voluntad de no secundar el paro y han recordado que la plataforma convocante no pertenece a ese organismo, "porque simplemente no tiene representatividad acreditada suficiente", circunstancia que su máximo dirigente pretende soslayar mediante el "menosprecio de sus miembros".
En un comunicado, estas organizaciones acusan a los convocantes de pretender ocultar que la única fuerza negociadora que tienen es "el nivel de coacción que le permitan ejercer respecto de las empresas y profesionales que, mayoritariamente, desean trabajar".
La Federación Nacional de Asociaciones de Transporte de España (Fenadismer), también miembro del CNTC, ha rechazado este miércoles de forma unánime este paro, que no considera justificado después de las medidas legislativas aprobadas recientemente por el Gobierno.
La federación, que agrupa a más de 30.000 pymes y autónomos de transporte, con más de 60.000 vehículos, defiende que las citadas medidas, que esperan que se prorroguen a partir de enero, han permitido a los transportistas incrementar sus tarifas y disfrutar de bonificaciones y ayudas directas para compensar el encarecimiento de los carburantes.
En la misma línea, las patronales CEOE, Cepyme y ATA han expresado su oposición al paro, pues consideran que "agravará la difícil situación económica" de las empresas "y la población en general"; y han pedido al Gobierno que garantice la libre circulación y seguridad de los transportistas que deseen trabajar.
En la misma línea se ha pronunciado el presidente de la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA), Javier González de Lara, quien ha pedido "sensatez y comprensión" a los transportistas convocantes de la huelga y, sobre todo, "solidaridad" con el resto de las actividades empresariales y que "se garantice la libertad de elección, de optar por el trabajo".
Mientras, la ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, confía en que la plataforma convocante acabe rectificando e insiste en que el Gobierno está haciendo todo lo que está en su mano para cumplir los compromisos con el sector.