La poeta malagueña María Victoria Atencia, Premio Nacional de las Letras 2025
Vinculada a la Generación de los 50, su poesía ha destacado por su estilo hondo y cristalino y por su capacidad para abordar temas universales a partir de lo cotidiano.
La poeta malagueña María Victoria Atencia (Málaga, 1931), una de las exponentes de la generación de los 50, ha sido galardonada con el Premio Nacional de las Letras Españolas 2025.
El jurado del premio, dotado con 50.000 euros y que concede el Ministerio de Cultura, ha elegido a la autora por "una creación poética que posee y recrea la esencia de la vida".
"En sus versos, la palabra se justifica a sí misma por su capacidad de trasmitir instantes de trascendencia emocionante, por una clara fe en el valor representativo y por la relevancia de su belleza", señala el fallo.
El jurado también ha destacado que su lírica "parece brotar de manantial sereno, atravesada por un verso limpio de traspasada pureza y por la búsqueda de una perfección sin ambages". "En su poética, a modo de tapiz, cada puntada sirve de armazón para el conjunto global y para otorgar un significado que multiplica sus efectos estéticos", precisa el fallo.
Ligada desde muy joven a los poetas del grupo Caracola, Atencia es una de las exponentes de la generación de los años 50. Su obra ha sido traducida al francés, portugués, inglés, italiano, lituano, checo, búlgaro, rumano, polaco, sueco, árabe o hebreo, entre otros idiomas.
Su poesía ha destacado por su estilo hondo y cristalino y por su capacidad para abordar temas universales a partir de lo cotidiano. El amor, la soledad, el mar, la nostalgia, la música y la pintura forman parte del universo casi místico de esta autora, vinculada desde joven al grupo Caracola, que surgió en la Málaga de mediados del pasado siglo en torno a la revista de ese nombre.
Entre sus libros destacan 'Tierra mojada', 1953; 'Cuatro sonetos', 1955; 'Cañada de los ingleses', 1961; 'Los sueños', 1976; 'El mundo de M.V.', 1978; 'Compás binario', 1979; 'Adviento', 1983; 'Trances de Nuestra Señora', 1986; 'De la llama que arde' y 'La pared contigua', de 1989.
En 1991 recopiló sus trabajos más representativos en 'Antología poética' a la que siguieron 'La señal', del mismo año y 'La intrusa' y 'El puente', ambas de 1992.
Entre sus obras más recientes figuran 'Semilla del Antiguo Testamento', de 2020, con dedicatoria especial a las víctimas de la pandemia de coronavirus; 'Certeza de la luz', de 2021, libro homenaje en su noventa cumpleaños y 'Una luz imprevista: poesía completa', que recoge toda su producción poética desde 1961. Este último volumen lo presentó en 2022 en la sede del Instituto Cervantes de Madrid, en cuya Caja de las Letras permanece, desde ese año, una muestra de su legado.
De los numerosos premios recibidos destaca el Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana 2014, el galardón más importante de poesía en lengua española y portuguesa; la malagueña fue la cuarta mujer que lo obtenía y la primera española.
También ha ganado el Premio Nacional de la Crítica 1997, el Premio Internacional de Poesía Federico García Lorca 2010 y el Premio Real Academia Española 2012 por su libro 'El umbral'.
Es académica de número de la Real de Bellas Artes de San Telmo de Málaga y correspondiente de las de Cádiz, Córdoba, Sevilla y San Fernando; consejera del Centro Andaluz de las Letras y de la Fundación María Zambrano, y Honorary Associate de The Hispanic Society of América (Nueva York).
Desde 2018 es vocal del Patronato del Instituto Cervantes, forma parte del Centro Andaluz de las Letras, del Centro Cultural Generación del 27 de Málaga, del Centro Fundación Generación del 27 de Madrid y de la Fundación María Zambrano de Vélez-Málaga.
La poeta, que en ocasiones ha figurado entre las candidatas al premio Cervantes, da nombre a un instituto de enseñanza secundaria de Málaga, una avenida y al Centro Cultural Provincial también de la capital malagueña.
