En La Mañana de Andalucía de Jesús Vigorra, Antonio García Barbeito dedica sus perversos a la polémica en un colegio de Palma de Mallorca después de que los alumnos de un aula de Bachillerato fueran expulsados de clase porque exhibieron una bandera de España para animar a la selección española en el Mundial de Qatar. ¿Qué queréis hacer de España, partida de mamarrachos? ¿Borrarle el nombre, romperla, poco a poco, cacho a cacho? ¿Desbaratarle la historia hasta arrancarle de cuajo su identidad, su bandera, su himno, su lengua?? ¡Qué asco da ver lo que pretendéis algunos, con los aplausos de quienes le tienen odio a este pueblo noble y alto! En Baleares, en Palma, con tal de estar animando a España en este Mundial, una bandera colgaron en un colegio, y llegó la profesora bufando y se negó a dar la clase mientras colgara aquel trapo, que así llamó a la bandera un profesor? ¡Tiparraco, valentón de lo textil, cobarde de tres al cuarto?! Y ella, ¿qué digo de ella, profesora? de qué espanto? ¿Qué podrá enseñar la tipa, si es el odio su tratado? Pero la culpa de todo la tiene Pedrito Osario, el que ahora sale y presume de haber exhumado a Franco? Porque él está consintiendo que a España le den el trato que quieren sus enemigos, el que sus socios del cargo le obligan, porque lo tienen cogido por?los zapatos, incluso por los? cordones, y por sitios no tan bajos. Está dejando que a España la traten como a un cacharro, como si España tuviera que avergonzarse de algo? Esto que ha pasado en Palma en colegio concertado; este negarse a una clase con la bandera colgando; esto es culpita de Sánchez, por consentir tanto y tanto. ¿Quiere pasar a la historia? Pues que vaya ya pasando?