El Tribunal Supremo ha confirmado la condena de cuatro años y medio de prisión impuesta por la Audiencia Nacional al expresidente de Caja Madrid Rodrigo Rato por apropiación indebida continuada en el caso de las tarjetas "black".
El alto tribunal ha rebajado las penas a los consejeros que devolvieron el dinero antes de celebrarse el juicio. Rato ingresará en prisión en las próximas semanas. Cuando el Tribunal Supremo remita la orden de ejecución de la sentencia, el exvicepresidente del Gobierno dispondrá de diez días para ingresar en la cárcel.
En su fallo, el alto tribunal estima que Rato "mantuvo y amplió un sistema pervertido desde su origen", mediante el cual los condenados actuaron como si fueran "dueños del dinero", invirtiendo los importes que consideraron oportunos en desembolsos que ellos mismos decidieron.
Por su preparación y experiencia, Rato no podía ignorar el funcionamiento opaco de las tarjetas, pese a lo cual "mantuvo el sistema e incluso lo amplió a otras personas"; primero, a su favor -hizo un gasto de 99.055 euros-, y, ya en Bankia, de sus más estrechos colaboradores.
La sentencia de la que ha sido ponente el juez Miguel Colmenero considera que el exvicepresidente del Gobierno "no puede ampararse en ilegalidades anteriores para continuar manteniéndolas".