También ha lamentado su detención ayer y haber dormido en los calabozos. A su salida del juzgado, ha tachado de tercermundista que cinco artículos del Código Penal recojan ofensas a la religión, delito del que se le acusa.
Toledo solo ha contestado a una única pregunta de su abogado, en la que se ha ratificado en un escrito que presentó hace unos meses donde insiste en que no ha cometido "ningún delito" y, por tanto, no considera "necesario" presentarse ante "ningún juez ni fiscal", según él mismo ha informado a los medios a la salida del juzgado.
De hecho, ha vuelto a pronunciar las palabras que escribió en su perfil de Facebook y que están en el origen de la denuncia.
"Me cago en Dios y me cago en la virgen y me sobra mierda para cagarme en el dogma de fe y en la santidad de la virginidad de la virgen María 27 mil veces como hacéis todos los que tengo aquí delante todos los días de vuestra vida", ha reiterado Toledo.
Ha apelado a la "desobediencia civil" para abrir un debate sobre si es "realmente necesario" que sigan existiendo este tipo de delitos.