Antonio Vega, el poeta maldito del pop español
El compositor y cantante Antonio Vega fallecía el 12 de mayo de 2009 a los 51 años, a causa de un cáncer de pulmón que le habían detectado unos meses antes y dejó un vacío imposible de llenar al pop español.
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Formó Nacha Pop en 1978 con su primo Nacho García Vega y escribió grandes temas como “Chica de ayer” o “Una décima de segundo”. A lo largo de diez años, la banda grabó siete álbumes. Las diferencias de carácter, personalidad y ambiciones de los miembros del grupo, y los problemas con las drogas de Antonio, llevaron a su disolución a finales de los 80.
En 1991 comenzó su carrera en solitario con la publicación de su primer disco en solitario “No me iré mañana”. Solía arrastrar fama de artista al borde del precipicio. Sin embargo, a través de sus canciones, el artista madrileño desnudaba el alma y se mostraba sincero ante quienes de verdad quisieran escuchar y entender su expresión.
Antonio Vega nació en diciembre de 1957, “con mucha prisa”, fue sietemesino. Tuvo una infancia tranquila, feliz, pero no fue un niño corriente. “Demasiado a menudo, su cabeza le llevaba a lugares diferentes y más profundos que a cualquier otro niño de su edad” su madre preocupada por su introspección le llevó a un psicólogo, quien determinó que Antonio era un niño superdotado.
En su casa familiar, la música estaba muy presente. Su padre, Ricardo Vega, había cantado ópera de joven, y su tío Tino era barítono profesional. La biógrafa del artista comenta en el libro que Antonio nunca llegó a recibir clases de música. “Su único profesor de guitarra fue su hermano Carlos, quien, al ver el interés que mostraba Antonio por la música, se sentaba a su lado para enseñarle acordes, giros, solos y tratar de responder a las interminables preguntas de su hermano pequeño”.
Aquellas clases particulares fueron la semilla del amor y la pasión de Antonio por la música que duraría toda la vida, siendo joven disfrutaba escribiendo (ganó un concurso de relatos con dieciséis o diecisiete años) llegó a matricularse en Arquitectura, pero aguantó solo dos años.
También relata su biógrafa que, durante toda su carrera en solitario, Antonio no dejó de tocar una, dos y hasta tres veces por semana: “Tan solo hubo breves interrupciones de esa gira constante en la que convirtió su vida para grabar un nuevo disco o intentar una vez más una desintoxicación que siempre resultó infructuosa”.
Una personalidad, atrayente y magnética que a la que rendimos homenaje en Canal Fiesta Radio.
