La pesadilla de Francisco, contagiado en el macrobrote de Mallorca
Este sevillano era el conductor del autobús que trasladó a casa a siete jóvenes afectados de covid-19. En una entrevista en Hoy en día ha explicado las secuelas de la enfermedad tras pasar 68 días en la UCI.
Francisco Javier ha pasado 68 días ingresado en la UCI y otros 15 días en planta afectado de covid-19 .Tiene muchas secuelas: ha perdido 30 kilos, le van a tener que amputar dos dedos necrosados de la mano izquierda y sigue sondado.
Se contagió en junio, cuando solo tenía puesta la primera dosis de la vacuna. Francisco Javier es sevillano, de Mairena del Aljarafe y era el conductor del autobús que trasladó a siete jóvenes afectados del macrobrote de covid-19 detectado en Mallorca este verano. Ha contado su caso en Hoy en día, donde ha explicado que se siente "impotente de tener que depender de su familia por no poder moverse de forma independiente".
Dice que los síntomas de la enfermedad los notó a la semana de haber vuelto del viaje. Francisco Javier contagió a su mujer, a su madre e incluso a su hijo de 13 meses. Antes de saber que estaba contagiado habían celebrado una barbacoa familiar.
