Las personas dependientes ya están siendo vacunadas en sus casas
Lola y Ángel tienen 90 años y viven en un cuarto piso sin ascensor. Han recibido la primera dosis de la vacuna pfizer. En unos quince días recibirán la segunda.
A sus 84 años, María lleva cuatro encamada. Tras la inyección, las enfermeras esperan 15 minutos por si surgiera algún efecto secundario como fiebre o dolores musculares.
Desde este viernes se está vacunando en Andalucía a los grandes dependientes, a las personas que no pueden desplazarse de su domicilio a los puntos de vacunación que se han establecido.
Los sanitarios son los que se desplazan a cada vivienda. Hemos acompañado a estas enfermeras, que han ido a casa de Lola y Ángel para ponerles la vacuna.
Las enfermeras Margarita y Magdalena, casa por casa, vacunan a los grandes dependientes, aquellas personas que no pueden salir de sus domicilios. Es el caso de nuestra parejas protagonista, Lola y Ángel.
Tienen 90 años y viven en un cuarto piso sin ascensor. Han recibido la primera dosis de la vacuna pfizer. En unos quince días recibirán la segunda.
A sus 84 años, María lleva cuatro encamada. Tras la inyección, las enfermeras esperan 15 minutos por si surgiera algún efecto secundario como fiebre o dolores musculares.
Una labor muy satisfactoria acercar la vacuna a sus casas a los más frágiles. Sin olvidar que a pesar de las vacunas hay que continuar con las medidas de seguridad.
El consejero de Salud, Jesús Aguirre ha anunciado que Andalucía ha recibido este viernes la mitad de las dosis de Astrazeneca previstas, lo que obliga a una reorganización de la planificación de la vacunación.
No obstante, la idea es comenzar la semana que viene a vacunar a los miembros de las fuerzas y cuerpos de seguridad del estado, que serán citados conforme vayan llegando las dosis necesarias.
