Incautadas en Barbate dos toneladas de hachís
La Policía Nacional se ha incautado de un alijo de dos toneladas de hachís en la playa de Zahora, en las inmediaciones del Faro de Trafalgar (Barbate, Cádiz).
En la denominada operación "Coro", realizada en el marco del plan antidroga de la provincia de Cádiz, los agentes han detenido a cuatro personas, una de ellas menor, cuando estaban desembarcando la droga desde una lancha neumática.
En total se aprehendieron cincuenta y cinco fardos que arrojaron un peso total de 2.000 kilos de hachís.
La operación se inició a raíz de los servicios de vigilancia puestos en marcha en diferentes localidades de la provincia ya que se ha detectado que la fuerte presión policial en el Campo de Gibraltar ha hecho que las redes desplacen sus lugares de desembarco a otros puntos.
Así se detectó una organización de narcos que operaban por la zona de Zahora, en la localidad de Barbate, para desembarcar grandes cantidades de hachís desde embarcaciones semirrigidas.
El pasado 1 de febrero los investigadores observaron una embarcación semirrígida se dirigía a la playa de Zahora cargada con un importante número de fardos mientras en la costa esperaban más de veinte personas que, una vez llegada la lancha a la costa, descargaron los fardos.
En ese momento se activó el dispositivo policial que se encontraba en la zona.
Al percatarse de la presencia policial, los narcotraficantes emprendieron la huida y abandonaron la mercancía que habían descargado y la que aún había en la lancha, que había sido cargada en la costa de Marruecos.
Agentes de la Policía y de la Guardia Civil localizaron y detuvieron en las inmediaciones a cuatro personas, que llevaban equipos de transmisión y teléfonos móviles de la organización.
Los detenidos son un español y tres ciudadanos marroquíes, uno de ellos menor de edad.
Todos ellos fueron puestos a disposición del Juzgado de Instrucción número 1 en funciones de guardia de Barbate (Cádiz), que ha decretado prisión provisional para los tres adultos.
El menor extranjero fue puesto a disposición de la Fiscalía de Menores y, ha sido internado en un centro de reforma en régimen cerrado.
Esta operación ha permitido detectar que las redes renuevan de forma constante su forma de introducir alijos y funcionan como un verdadero "mercado de logística" de la droga.
Para abaratar precios, varias organizaciones se reúnen para acordar varios "pedidos" en una misma lancha.
Para identificar la droga una vez que llega a España, en origen se etiqueta cada paquete de hachís con inscripciones rotuladas en la tela de la arpillera, para que una vez en la "guardería" sea más fácil de distribuir por los encargados del transporte.
Una de las inscripciones usadas en esta ocasión ha sido "piloto".
Una vez abierto el fardo se observó en su interior que, además de paquetes cuadrados de un kilogramo aproximadamente para la distribución al por mayor, se completaba con pequeñas cápsulas o "bellotas" ya preparadas y envasadas con su logotipo para la venta al por menor de la sustancia conocida como "critical", más cotizada por su alto contenido en THC
