Esta vez Francisco no solo se libra del desafío final que padeció en otras ocasiones, su dueto con Javier González interpretando "Mi vida es mía", fue una de las claves de su triunfo en la gala.
El pequeño ya anunció al comenzar el programa que no tenía ningún deseo de volver a pasar por el mal trago de verse al borde de la eliminación, como ya le ocurrió en dos ocasiones anteriores. Y empezó con buen pie llenando de emociones la canción de Salmarina.