En apenas 10 años, los pueblos almerienses con oficina bancaria han pasado de ser 705 a sólo 400.
La así llamada "exclusión financiera" hace que se incremente la tendencia a la despoblación.
Hace una década, 705 pueblos almerienses contaban con sucursales de bancos o cajas de ahorros. Ahora sólo 407 mantienen este servicio, que es fundamental para los habitantes más mayores de estas localidades, y que dificulta aún más que la población más joven decida permanecer en ellas.
Andalucía Directo ha viajado a la Alpujarra para comprobar las complicaciones que causa a sus vecinos la desaparición de las oficinas bancarias. Una tendencia que parece imparable, ya que las entidades financieras siguen apostando por reducir costes a base de reducir las transacciones a las realizadas a través de internet y tarjetas de crédito.