La sequía y las dificultades para encontrar trabajadores para el campo son dos de los principales problemas a los que se enfrentan los agricultores
El campo pasa por uno de sus peores momentos debido a la sequía. Las últimas lluvias son insuficientes y el futuro del campo depende de la mejora de las infraestructuras.
Los agricultores reivindican también un cambio de normativa ante las dificultades para encontrar trabajadores, aunque las próximas cosechas esperan que sean mejores. En especial, la de la aceituna. El precio del aceite sigue bajando en origen, aunque de momento no va a repercutir en el consumidor.
Con la vista puesta en Europa, no descartan mantener las protestas, ni si no hay cambios sustanciales en la PAC.