La Feria de Málaga que no fue

La imagen de alegría y fiesta no se repetirá este año en Málaga. Este sábado hubiera  comenzado la feria de agosto, un motor de la economia local, generador de ingresos por valor de 60 millones de euros. Ese ambiente festivo se  ha trasladado a  algunso bares y a los hogares de los malagueños. Aún asi, y para evitar neuvos brotes, mas de 700 policías van a vigilar que nadie celebre la fiesta por su cuenta. Este año tendremos que conformarnos con su recuerdo. Hay quien se ha comprado el traje para celebrarlo en casa.

Esta prohibido bailar dentro de los bares, beber en la calle, en restaurantes no más de 12 personas en una mesa, en el ámbito privado, como mucho, 15.

Es la primera vez en años que Málaga no instala su portada de feria. El característico trasiego de hosteleros ultimando detalles en el centro histórico deja paso hoy al silencio que desde hace meses reina en sus calles. Aunque los malagueños no se resignan a dejar de vivir su feria, eso sí, con todas las medidas sanitarias necesarias.

Muchos son los bares que han adaptado su interior simulando una auténtica caseta de feria con mesas debidamente distanciadas. También en las tiendas de moda flamenca se ha notado estas ganas de vivir una feria diferente. De hecho, muchas son las malagueñas que han recogido su traje, su accesorio a juego con su mascarilla tan sólo para hacerse la foto en casa. Una feria que este año más que nunca se vive desde el corazón y que se prevé que deje millones de euros en pérdidas.