Según el Vaticano, Francisco padece una infección polimicrobiana en las vías respiratorias y su hospitalización se alargará.
Aunque precisa que no se trata de un agravamiento, sino de una evaluación más completa de la patología por la que fue ingresado el pasado viernes.
El papa Francisco pasa su quinto día ingresado en el hospital Gemelli de Roma, donde recibe tratamiento por "una infección polimicrobiana del tracto respiratorio" que este lunes ha obligado a cambiarle la terapia que recibe y que hace prever que seguirá hospitalizado varios días más.
Según el último comunicado del Vaticano, el papa sigue estable y sin fiebre; aunque su cuadro clínico es "complejo", precisa que no se trata de un agravamiento, sino de una evaluación más completa de la patología por la que fue ingresado el pasado viernes. El Pontífice está tranquilo y su humor es bueno, según el portavoz del Vaticano.
"El Santo Padre continúa sin fiebre y con el tratamiento prescrito. Las condiciones clínicas son estables", se indica en el último parte de la Santa Sede sobre el estado de salud del pontífice, de 88 años.
Previamente, el Vaticano había explicado que las últimas pruebas realizadas mostraban "una infección polimicrobiana del tracto respiratorio que ha obligado a modificar aún más la terapia" de Francisco, cuyo tratamiento ya se había sido cambiado el sábado, después de los primeros exámenes.
El Vaticano añade además que el "cuadro clínico complejo requerirá de una hospitalización adecuada", lo que hace prever que el papa permanecerá varios días en el hospital y que probablemente se pierda algunos de los múltiples actos del Año Santo, como ya ha sucedido con su cancelada visita a los famosos estudios de cine de Cineccita.
El portavoz del Vaticano, Matteo Bruni, aclaró que no se trata de un "agravamiento" del estado de salud del pontífice, sino que el cambio del tratamiento se debe una lectura de los análisis realizados en los días pasados, que muestran una evaluación más completa de la patología, en este caso, una infección polimicrobiana. Por tanto, Bruni aclaró que no se ha hablado de una fecha para que se le dé el alta.
Por ahora solo se ha anulado la audiencia general de este miércoles, aunque algunos medios aseguran que el próximo domingo tampoco presidirá la misa por el Jubileo de los diáconos, a pesar de que este extremo no ha sido confirmado oficialmente.
Mientras, el papa continúa recibiendo la Eucaristía y leyendo los periódicos, y por primera vez desde su ingreso se hace referencia a "algunas actividades actividad laborales y a la lectura de textos".
Además, el papa se mostró "conmovido por los numerosos mensajes de cariño y cercanía que sigue recibiendo en estas horas". Y "en particular, desea expresar su agradecimiento a quienes se encuentran actualmente hospitalizados, por el cariño y amor que expresan a través de sus dibujos y buenos deseos; Él ora por ellos y pide que oren por él".
Además, se ha sabido que Francisco ha continuado llamando, tanto el viernes como el sábado, a la parroquia de la Sagrada Familia, la única iglesia católica de Gaza. "Nos ha llamado el viernes y el sábado, tenía la voz un poco cansada pero estaba de buen humor y ha querido saber cómo estábamos", explicó un colaborador de la parroquia en un canal de televisión del grupo italiano Mediaset.
Desde que empezó la guerra, el papa llama todos los días a la parroquia, donde se encuentran refugiadas 600 personas, y ha querido seguir haciéndolo durante su hospitalización, han explicado desde la iglesia, cuyo párroco es el sacerdote argentino Gabriel Romanelli.