El consumo de ansiolíticos se dispara con el confinamiento
Los psicólogos están convencidos de que la intervención de psicólogos clínicos en atención primaria reduciría enormemente las recetas de fármacos.
El consumo de ansiolíticos y antidepresivos ha aumentado muchísimo durante los dos primeros meses del confinamiento: marzo y abril.
Las patologías más frecuentes han sido trastornos del estado de ánimo, ansiedad y somatización. Y el rebrote veraniego y el miedo a un nuevo confinamiento no mejoran estos datos.
El coronavirus empezó a colarse en nuestras vidas. Primero, miedo a un virus desconocido y peligroso. Luego, cambio total de hábitos con el confinamiento. Y ahora, miedo e incertidumbre ante los rebrotes y lo que pueda pasar en otoño.
Entre el personal sanitario y los pacientes de covid, ha aumentado el estrés postraumático. Y entre las personas que no han podido despedirse de sus familiares, los duelos patólogicos.
Con todo, han crecido las consultas psicológicas y el consumo de fármacos. Comparando abril de este año con el del año pasado: un 12 por ciento más los ansiolíticos y un cinco por ciento los antidepresivos.
Los psicólogos están convencidos de que la intervención de psicólogos clínicos en atención primaria reduciría enormemente las recetas de fármacos.
