Sevilla ultima los preparativos para la final de la Liga Europa

Continúan los preparativos en la ciudad de Sevilla para la final de la Europe League, la Liga Europa a la que aspiraban Sevilla y Betis, además del Barcelona de Xavi.

Ahora, los esfuerzos se centran en la zona cero, el estadio Ramón Sánchez Pizjuán, y las áreas destinadas a los aficionados de los dos equipos finalistas.

La zona de Cartuja para los seguidores escoceses del Glasgow Rangers, y el Prado de San Sebastián para los del Eintracht Frankfurt alemán. El público familiar dispondrá de la plaza de España.

El entorno del estadio Sánchez Pizjuán está vallado con prohibición de aparcar en algunas calles desde este mediodía, una restricción que se irá ampliando hasta el miércoles. Los bares del barrio de Nervión se preparan para la avalancha.

El Ayuntamiento ultima ya el dispositivo de seguridad y de movilidad para un evento que tiene a los hoteles al 100 por cien de su capacidad. 

Más de 5.500 agentes, de ellos más de 3.000 policías nacionales, velarán por la seguridad de la final de la Liga Europa que se jugará el próximo miércoles.

Policía Nacional y Local de Sevilla y Guardia Civil además de la seguridad privada del Ramón Sánchez Pizjuán participan en este dispositivo que se ha ultimado este lunes en la Subdelegación del Gobierno en Sevilla y que incluye otro antiterrorista que permanecerá activo de forma paralela con especial atención a nodos de transporte y zonas críticas de la ciudad en previsión de concentraciones de aficionados.

La fase crítica entrará en actividad el miércoles a las 15:00 horas hasta las 21:00 horas, con el inicio del partido, y en ella se establece un dispositivo antiterrorista y de prevención de orden público, con atención al estadio y zonas de concentración de aficionados.

Una vez concluido el encuentro, los agentes colaborarán en el desalojo del estadio, en el refuerzo de la seguridad en las zonas de embarque de aficionados en autocares y nodos de transporte, mientras que se mantendrá el dispositivo antiterrorista y de orden público.

Se espera que el partido de la final europea deje 50 millones de euros con hoteles que rozan el lleno, y con zonas preparadas para las aficiones.