La entrada de la cueva se usó como lugar donde protegerse, pero el resto tuvo un uso eminentemente funerario.
En la necrópolis se ha documentado una presencia elevada de cerámicas íberas, del bronce y calcolíticas.
Arqueólogos y voluntarios llegados de toda España trabajan en una cueva localizada hace un año en Sierra Mágina, Jaén, donde han descubierto una necrópolis de la que están extrayendo numerosos utensilios.
En esta necrópolis prehistórica ya se ha documentado una presencia elevada de cerámicas íberas, del bronce y calcolíticas. La cavidad tiene tan sólo unos 20 metros cuadrados, aunque se comunica con un laberinto de unos 500 metros de recorrido.
La entrada de la cueva se usó como lugar donde protegerse, pero el resto tuvo un uso eminentemente funerario. Esos restos se han trasladado ya al Centro de Investigaciones Prehistóricas de Sierra Mágina.
Es lo que se ha extraído en un mes de trabajo, pero esta cueva necesita años de investigación para desenterrar todos sus misterios.