La Fiscalía pide 17 años de cárcel para el progenitor y 9 para el otro acusado
Este martes ha comenzado en la Audiencia Provincial de Cádiz el juicio que sienta en el banquillo a un padre acusado de violar de forma reiterada a su hijo cuando tenía cuatro años. El acusado permitía, además, que otro adulto grabara con su móvil algunas de las agresiones sexuales cometidas dentro del domicilio familiar.
La Fiscalía pide 17 años de cárcel para el agresor y 9 para su cómplice. Según su informe, el presunto violador está divorciado y tiene otra hija a la que también intentó violar, aunque ésta logró escapar. La pequeña intentó ayudar a su hermano durante las agresiones, pero el padre amenazaba a ambos. Ambos menores han necesitado terapia.
Los hechos que ahora se juzgan se remontan a 2015 y 2016. La Fiscalía considera que el padre es autor de dos delitos de exhibicionismo y un delito continuado de agresión sexual a un menor, en el que concurre la agravante de parentesco, así como la ejecución de actos particularmente degradantes o vejatorios.
El Ministerio Fiscal pide para el progenitor, además de la pena total de 17 años de prisión, la privación de la patria potestad por seis años, inhabilitación para cualquier profesión, retribuida o no, que conlleve contacto regular con menores por cinco años y el pago de una indemnización en favor de sus hijos de 60.000 euros.
Asimismo, el fiscal procesa al adulto que grabó las violaciones como cómplice de un delito de agresión sexual y solicita para él la pena de nueve años de prisión, libertad vigilada por ocho años tras el cumplimiento de la posible condena de inhabilitación para cualquier profesión u oficio, retribuido o no, que conlleve contacto regular con menores por cinco años.