¿Cómo son los temidos incendios de sexta generación?
El fuego que arrasa Sierra Bermeja no es como todos.
Es el primero de su especie en España aunque ya se han visto similares en otros países.
Es un fuego que no se puede extinguir con los medios tradicionales y que crea su propio microclima.
Están íntimamente relacionados con el cambio climático.
Este fuego tiene rasgos de los llamados de "sexta generación", algo nuevo en nuestro país aunque sí lo hemos visto en países como Portugal o Grecia. Es muy agresivo y, según los expertos, y está directamente vinculado al cambio climático.
Tienen 3 características muy claras: no hay medios actualmente capaces de apagar esas llamas, hay que esperar a que bajen las temperaturas y a que llueva. Lo único que pueden hacer los bomberos es procurar que no avance.
Es también un fuego errático: se mueve sin control y sin una pauta que se pueda predecir. Y, además, se retroalimenta, creando una especie de "clima propio" que actúa a su favor y que ayuda a alimentar las llamas. Un incendio monstruoso que lo devora todo.
Isabel Vázquez, técnico del Infoca, explicaba en Mesa de Análisis que los temidos pirocúmulos son otra de las características de este tipo de incendios que tienen una "dinámica propia" y se produce, además, sobre una zona con una "enorme carga de combustible". De ahí que no se pueda afrontar con los medios tradicionales.
SUPERINCENDIOS Y SU RELACIÓN CON EL CAMBIO CLIMÁTICO
El riesgo de superincendios o incendios forestales de sexta generación, como el que afecta a Sierra Bermeja (Málaga), se ven acrecentado por el problema estructural de gestión forestal y del territorio en España, advierte la portavoz del programa de Bosques de la organización WWF, María Melero.
Estos incendios "de sexta generación" son fenómenos "virulentos" y difíciles de controlar, que ponen en peligro tanto el medio ambiente como las vidas humanas y están vinculados al cambio climático.
Las condiciones "especiales" de su desarrollo y su "agresividad" han sido las que le ha dado el nombre de "sexta generación", ya que, en este caso en concreto, se han producido en el incendio unos "comportamientos muy erráticos y cambiantes", lo que resulta "muy peligroso" para la población y los medios de extinción.
