18 DE OCTUBRE | 23:20 horas
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Capítulo 30 | Bomba contra varios oficiales

Pablo aprovecha y envía una carta con sacerdote dirigida al Presidente donde están consignadas las peticiones para que se pueda entregar

4 octubre 2017

En el capítulo 30 de la serie, los hombres de Pablo dan con el paradero de Armando el informante de la policía y lo matan. Berenice es dejada en libertad pero rompe en llanto al enterarse que Carmina fue asesinada.

Pablo le pide al abogado Patarroyo que traslade un mensaje al gobierno diciendo que hasta que no paren los atropellos de la policía no se piensan entregar. German Motoa se somete a la justicia mientras Pablo activa otra bomba dejando varios oficiales muertos.

Alberto Villamizar le envía un comunicado a Escobar donde le pide la liberación de Maruja, su mujer y Fernán, el cámara, hecho al cual se niega Escobar ya que se ha enterado que aún no se ha contemplado la no extradición dentro de la Constitución.

El señor Julio, padre de los Motoa, pide a Pablo que se reúna con el padre Herrera para que lo trate de convencer de entregarse. Pablo aprovecha y envía una carta con sacerdote dirigida al Presidente donde están consignadas las peticiones para que se pueda entregar. Una de ellas es que sea recluido en una cárcel cerca de Medellín, desde donde piensa seguir dirigiendo el cártel de Medellín, para lo cual pide a sus socios que sigan en el negocio del narcotráfico. Pablo anuncia la liberación de los dos últimos secuestrados. Siguiendo con más peticiones de Pablo, el Presidente destituye al coronel Pedraza. Finalmente Maruja Pachón es liberada.

Maruja se encuentra de nuevo con su familia después de ocho meses de secuestro. Mientras Fernán Santana también es liberado. El padre Herrera hace unas declaraciones en contra de Pablo diciendo que él es un pornógrafo, hecho que enfurece a Pablo diciéndole a Alberto Villamizar que exige que el padre se disculpe para seguir con el proceso de paz.

La periodista Niki deja el diario El Espectador para viajar a Nueva York para realizar una especialización.

Escobar ha adaptado el centro de reclusión La Catedral, antiguo hospital psiquiátrico, a su gusto. Después que el padre Herrera se disculpa con Escobar, este se entrega a la justicia colombiana para ingresar en la prisión a su medida.