Toñi Moreno se pone en la piel de una indigente para su programa 100

No se cumplen cien programas todos los días y la presentadora de “Gente maravillosa” ha decidido aprovechar y convertirse en actriz en una de las cámaras ocultas de esta semana.

En la cámara oculta, Toñi Moreno, caracterizada por una maquilladora especialista en efectos especiales, encarna a una señora mayor sin recursos que es invitada por una chica a comer en un restaurante.

La benefactora abandona el local cuando deja pagado el menú y en ese momento el encargado se opone a que se lo coma en su establecimiento: “No quiero mendigos en mi restaurante. Esto es un negocio, no un comedor social”, le dirá delante de la clientela, que no la reconoce en ningún momento de la escena.

¿ Cómo reaccionarán los clientes cuando vean que quieren expulsarla del local? ¿y cuándo descubran que tras la supuesta indigente se encuentra Toñi Moreno? Con esta cámara oculta, el programa quiere concienciar sobre un fenómeno en auge, la aporofobia, es decir, el desprecio a las “personas pobres o desfavorecidas”.

Está cámara ha contado con el apoyo y el asesoramiento de Solidarios para el Desarrollo y la Fundación Rais.