Conmoción en Burguillos, el pueblo de Toledo donde residía Laura Sanz, la joven de 38 años que murió ayer en París.
Laura y Luis Miguel, su marido, se alojaban en un hotel cercano a la panadería donde se produjo la explosión.
El matrimonio, que tiene tres hijos de 3, 5 y 10 años , había ido a pasar un fin de semana romántico a la capital francesa.
En la explosión murieron también otras tres personas, y más de 50 resultaron heridas, entre ellas dos españoles